“Como si fuéramos unos extraditables. Como si fuéramos unos delincuentes de alta gama”. Así dice Daniel Oquendo que fue su sensación al verse esposado de pies y manos y con una cadena a la cintura.
“No entiendo la necesidad de hacer eso”, señala.
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Indica que a los niños los registraron como a adultos y también esposaron a adolescentes de unos 16 y 17 años.
Oquendo, migrante colombiano deportado, era uno de los que inicialmente viajaba la madrugada del domingo a su país, pero el avión fue devuelto al no contar con la autorización del presidente Gustavo Petro de aterrizar en su país.
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“Al devolvernos a El Paso, Texas, nos quitaron las pertenencias”, lamenta el hombre, en entrevista con Caracol Radio, la tarde del 28 de enero de 2025.
“Si veníamos ya sobrevolando cielo colombiano no entiendo por qué no nos dejaron aterrizar. Al menos veníamos con nuestras pertenencias. En El Paso, al llegar, nos botaron las pertenencias a la basura”, señala Oquendo.
“Solo nos dejaron nuestra identificación y celulares”, afirma.
“Me entregué a la Patrulla Fronteriza”
Daniel Oquendo, con voz pausada, dice que comprende que llegó a Estados Unidos de forma irregular.
“Sé que nosotros entramos de manera ilegal a los Estados Unidos, pero la verdad es que el trato fue precario”, destaca.
Llegó la semana pasada y contó que el grupo en el que iba buscaba a la Patrulla Fronteriza para entregarse. Tenía la esperanza de pasar, pero los enviaron a un centro de detención de migrantes hasta que recibieron la noticia de deportación.
“Si yo hubiera sabido que no iba a ser escuchado, ni nada, opto por pasar derecho y no entregarme”, responde a la pregunta de Caracol Radio.
A San Diego llegó en un vuelo de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. De allí saldría hacia Colombia.
“Cuando llegamos allá nos quitaron todas las pertenencias, los sacos (chaquetas) nos dejaron simplemente con las camisetas y en una celda donde había bastante frío. Eso fue en San Diego”, describe.
“Si sabían que al otro día nos iban a traer a Colombia por qué nos botaron las cosas”, insiste Oquendo.
Nos dieron poca información, pero “al volverse algo mediático, el trato hacia nosotros cambió”.
Migración Colombia fue por nosotros a El Paso, Texas, y las condiciones de vuelo fueron distintas, detalla el hoy repatriado.
Petro, desde las redes, celebraba el regreso de sus compatriotas. Para ellos, pedía desde el domingo “un trato digno”.
Eso “mediático” es el serio impasse desatado el domingo tras la decisión de Petro y las respuestas de Estados Unidos, primero, cierre de la sección de visas en su embajada de Bogotá; segundo, el anuncio de imposición de aranceles a productos colombianos; así como sanciones de visado a funcionarios y familiares.
-¿En ese vuelo venían con usted algunos delincuentes?
- No, señor. Todos éramos migrantes que fuimos por un futuro mejor.
Oquendo cree que ningún delincuente podía abordar porque “estuvieran en una celda esperando condena”.
“Perdí mucha plata, gasté 5.000 dólares”
Niega que en el vuelo que lo devolvió finalmente a su país haya venido esposado. “No, señor. No hubo maltrato en ningún momento y no hubo restricciones de movilidad”.
Daniel Oquendo critica la decisión de Petro, tomada el domingo. Cree que fue “un show mediático del presidente para llamar la atención”.
-¿Usted va a volver intentar llegar a Estados Unidos?
- Por ahora no. Fue mucha plata perdida. Debo estabilizarme primero y pensar en mi futuro.
Sobre lo invertido dijo que “eso varía, pero va desde 3.000 a 5.000 dólares”.
-Yo gasté 5.000 dólares, confiesa.
-¿Qué iba a hacer a los Estados Unidos?
- Pensaba trabajar en un taller de mecánica de motos.
La decisión de salir de Colombia “fue muy rápida. Iba huyendo de unos problemas. Salí el 16 de enero y el lunes 20 (día de la juramentación de Trump) crucé la frontera”.
Gustavo Petro compara deportaciones de EE.UU. con trenes enviados a los campos de concentración
Este migrante no comparte la gestión de Petro y dice que eso también lo llevó a abandonar su país.
Daniel Oquendo salió de Medellín. Volverá a su tierra. “Gracias a Dios cuento con una familia y nos apoyamos”.
A los que piensan emigrar les dice: “En este momento no traten de llegar a Estados Unidos. Ese no es el único país, busquen otras opciones. Con la nueva presidencia (Trump) es imposible llegar a Estados Unidos. No están escuchando a nadie. No entienden razones”. (I)
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