El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este 22 de diciembre desde Mar-a-Lago un ambicioso plan naval para revitalizar la Marina de Estados Unidos con buques de guerra de gran tamaño.
Los nuevos buque están concebidos para reafirmar la supremacía militar estadounidense. Se trata de buques de la clase Trump USS Defiant.
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De momento, Estados Unidos ostenta el portaviones más grande del mundo, el USS Gerald R. Ford (CVN-78), pero Trump considera que hace falta aún más para mostrar el poderío naval estadounidense, pues la flota se ha envejecido.
La clase Trump estará conformada por buques de guerra blindado de grandes dimensiones
Trump mostró imágenes en Mar-a-Lago, Palm Beach, Florida, sobre la nueva clase de buques de guerra donde puede verse su apellido.
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Los buques de la clase Trump “serán los acorazados más grandes en la historia de nuestro país, los acorazados más grandes jamás construidos en la historia del mundo”, declaró el presidente a los periodistas en su residencia de Mar-a-Lago, en el estado de Florida.
El diccionario de la Lengua Española define el término acorazado como un “buque de guerra blindado de grandes dimensiones”.
El presidente Trump dijo que aprobó la construcción de dos enormes buques de guerra bajo el nombre de “Golden Fleet” de la clase Trump. La cantidad de barcos de guerra de esta clase puede alcanzar hasta los 25.
El líder republicano aseguró que estos acorazados serán “100 veces más potentes que cualquiera jamás construido”.
“Algunos de nuestros barcos se han vuelto viejos, cansados y obsoletos", dijo Trump
Los buques de la clase “Trump” desplazarán entre 30.000 y 40.000 toneladas, según publicó Fox News.
“Como saben, necesitamos barcos con urgencia. Algunos de nuestros barcos se han vuelto viejos, cansados y obsoletos”, afirmó el líder republicano, agregó Fox News.
Según Trump esta flota contribuirá a “la paz a través de la fuerza”, y aseguró que no está dirigida específicamente a contrarrestar a China sino a disuadir a “quien sea”.
Trump espera tener en dos años y medio aproximadamente los primeros dos nuevos acorazados. Los buques de la clase Trump estarán provistos de misiles, cañones tradicionales, armas hipersónicas, cañones de riel electromagnético y sistemas láser avanzados.
Además, incorporarían misiles de crucero con capacidad nuclear y defensas de última generación.
El anuncio de Trump coincide con un gigantesco despliegue militar en el Caribe, cerca de Venezuela. Durante las maniobras militares emprendidas desde agosto fuerzas estadounidenses han bombardeado al menos 28 lanchas con un saldo de 104 presuntos traficantes de drogas muertos.
Además, desde el 10 de diciembre a la fecha agente de la Guardia Costera estadounidense han incautado dos barcos con unos 4 millones de barriles de petróleo venezolano.
Estados Unidos argumenta que se trata de barcos incluidos en la llamada flota fantasma de buques sancionados usada por Irán, Rusia y Venezuela.
Venezuela denuncia las operaciones de Estados Unidos como un bloqueo naval ilegal enmarcado en acciones de piratería. También indica que la administración de Trump usa la lucha antinarcóticos para enmascarar planes destinados a un cambio de régimen en Venezuela. (I)