Halloween es probablemente el día más importante del año para la venta de dulces, en ese sentido, Candy Warehouse, una querida empresa de este rubro, se declaró en quiebra el 24 de octubre, a pocos días de la celebración.
De acuerdo a The Sun, esta empresa abrió por primera vez sus puertas al público en 1998 y ofrece sus servicios a hoteles, hospitales, restaurantes, tiendas de dulces y particulares.
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Más allá de la venta de dulces, esta pequeña empresa familiar también vende artículos para fiestas, juguetes, bocadillos y refrescos.
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¿Por qué se declaró en bancarrota?
Al declararse en quiebra, Candy Warehouse reveló que tenía mayores pasivos que activos, por lo que se encuentra insolvente y ya no tiene la capacidad de pagar sus deudas.
Las leyes estadounidenses establecen que una empresa puede declararse en quiebra basándose en el Capítulo 11 si desea permanecer abierta.
El Capítulo 11 de bancarrota requiere que una empresa reorganice su metodología para mantener el negocio a flote, de modo que pueda pagar los créditos con el paso del tiempo, generalmente a través de la venta de sus activos.
Los cambios que los consumidores han implementado en sus hábitos de gastos ha generado grandes desafíos a la industria de los dulces, y es que tal como lo indica un estudio hecho en 2023, 47% de ellos optan por golosinas más saludables para reducir su consumo de azúcar, especialmente después de la pandemia.
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