En la Ciudad de Nueva York, varias docenas de edificios departamentales administrados por Pinnacle Group de Joel Wienner y que albergan miles de unidades con renta estabilizada, serán puestos a la venta meses después de haberse acogido al Capítulo 11.
De acuerdo a Bloomberg, los abogados que se encargan de supervisar estos edificios, distribuidos en Brooklyn, Queens, Manhattan y el Bronx, explicaron en un documento judicial del 19 de septiembre que comercializarán las propiedades para una posible subasta de quiebra y también pedirán ofertas para una posible refinanciación.
Publicidad
Este acuerdo está incluido en un convenio con el prestamista Flagstar Bank, que cuenta con una deuda que supera los 564 millones de dólares sobre los edificios e inicio de demandas de ejecución hipotecaria a comienzos del 2025.
Dicho documento judicial establece que cualquier transacción por la totalidad o parte de los edificios “no afectará los contratos de arrendamiento vigentes de las propiedades de los deudores”.
Publicidad
Esto quiere decir que cualquier persona que desee comprar o refinanciar los inmuebles tendrán que hacerlo respetando los contratos de arrendamiento que se mantienen vigentes. Estos edificios cuentan con más de 5.100 apartamentos con renta estabilizada.
AInvest explica que un juez de quiebras de Nueva York será quien se encargue de aprobar estos términos. Ante esto, se insta a los postores a presentar manifestaciones de interés no vinculantes antes del 21 de noviembre, de modo que los abogados que supervisan las propiedades presenten las ofertas máximo el 21 de diciembre.
¿Qué pasa si este proceso obtiene una aprobación judicial?
De obtener la aprobación judicial, en enero se llevará a cabo una subasta. Los asesores de los edificios de Pinnacle contrataron a la firma de asesoría inmobiliaria Eastdil Secured, que “inició el proceso de comercialización identificando y contactando a numerosos posibles postores externos”, detallan documentos judiciales.
Al vender o refinanciar las propiedades, se podría resolver la disputa entre Pinnacle y Flagstar, así como con los residentes de los edificios, quienes han declarado que Pinnacle ha sido lenta o ineficaz por años en responder a problemas como filtraciones o plagas de insectos.
(I)