En las dos últimas décadas Erin Merryn, de 40 años, se ha dedicado a trabajar para promover la “seguridad personal del cuerpo”, luego de sobrevivir al abuso infantil del que fue víctima cuando a penas tenía 6 años. “Mi objetivo es dar voz a los niños y encerrar a los depredadores”, admite la escritora y activista cuya iniciativa está apoyada bajo la Ley de Erin.
