La prestigiosa marca alemana Mercedes-Benz tomó la decisión de rendir homenaje a la historia de la Clase G, al inmortalizar un modelo 280 GE de 1979 dentro de un gran cubo de resina color ámbar, lo que se considera como una obra artística hecha para simbolizar la durabilidad y el legado del icónico todoterreno bajo el lema: “Más fuerte que el tiempo”.

De acuerdo al portal SuperCarBlondie, el Clase G fue lanzado originalmente en 1979 como un automóvil hecho para uso militar, con un enfoque utilitario. Con el paso de las décadas, este modelo evolucionó sin perder su esencia y se convirtió en un vehículo utilitario deportivo (SUV, por sus siglas en inglés) de lujo, que mantiene intactos sus valores fundamentales de resistencia y carácter.

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Al contar con un diseño robusto, un estilo sofisticado y un rendimiento sobresaliente, este automóvil se convirtió en uno de los más reconocibles de Mercedes-Benz, tanto así que es un símbolo de estatus muy apreciado entre las celebridades y conductores que buscan lujo sin renunciar a la capacidad todoterreno.

Con motivo del lanzamiento de la nueva generación de la Clase G en 2018, la marca alemana intentó ir más allá de de una simple presentación: recubrió completamente un G-Class 280 GE de 1979 con más de 10.700 galones de resina líquida, en un proyecto monumental que requirió casi 9.000 horas de trabajo meticuloso.

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¿Cómo fue el proceso?

La instalación empezó con la construcción de un marco cuadrado de gran tamaño, dentro de este se puso el vehículo en una posición inclinada que buscaba simular el movimiento fuera de la carretera. La resina fue vertida y se dejó solidificar cuidadosamente antes de retirar la estructura, dando como resultado un cubo que, Mercedes-Benz asegura, refleja la singularidad y la fortaleza del ADN del Clase G frente al paso del tiempo y las modas.

Luego de su presentación, que se llevó a cabo en el Salón del Automóvil de Detroit, la obra comenzó una gira internacional que lo consolidó como un símbolo del espíritu G-Wagen. Más tarde, la marca reforzó ese mensaje con otra hazaña al celebrar los 40 años del modelo haciendo que un Clase G recorriera el muro casi vertical de una presa en Argentina, dejando claro que ese vehículo no solo es “más fuerte que el tiempo”, sino también que la gravedad.

(I)

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