En una jornada de nervios, caídas y abanicos, el primer maillot amarillo de la 112 edición del Tour de Francia se posó en los hombros del belga Jasper Philipsen (Alpecin Deceuninck) tras imponerse en una jornada inaugural caótica en la que algunos nombres ilustres, como Evenepoel, Almeida, Roglic y Carlos Rodríguez se dejaron en un corte 39 segundos.