“No sé nada, estoy de vacaciones, de verdad”. Estas fueron las primeras palabras de Xavi Hernández nada más aterrizar en Barcelona, al filo de las 14:10 hora loca, procedente de Doha. El técnico del Al Sadd, que llevaba dos años sin pisar tierras catalanas por culpa de la pandemia de COVID-19, se encontró con una comunión de periodistas y cámaras que le estaban esperando en la puerta de salida de la Terminal 1.