En junio pasado, Independiente del Valle hacía oficial la salida del arquero Moisés Ramírez, que en la actualidad milita en el Kifisia de la primera división de Grecia.

Meses después de dejar al conjunto rayado, el guardameta contó detalles sobre esta situación y también los motivos.

“Fue mutuo acuerdo, ellos sabían que necesitaba salir para jugar. Sentí que ya había cumplido con el club en todo el tiempo que estuve, que fue increíble”, dijo.

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“Necesitaba ser escuchado, que me vean como soy. No hay nada raro aquí, soy una persona humilde que escucha, calla y aprende. Soy un chico que lucha por sus sueños y busca mejorar cada día para darle lo mejor a su familia y al país”, agregó en conversación con Olé.

Y continuó: “Soy muy tranquilo, no sé qué hice a la gente para que esté en mi contra. Dejé de hablar por las críticas, pero eso me hizo más fuerte en lo personal”.

Con respecto al estilo de juego que mostró durante su etapa como jugador rayado, Ramírez justificó que sus acciones.

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“Por ahí se veía un poco sobrado la manera en que yo juego, pero así jugaba el club. Estar adelantado al límite eran cosas que me pedían. Lo disfruto y me hago cargo de los errores. Desde niño juego así y los cuerpos técnicos me dieron la confianza”, concluyó. (D)