El italiano Enzo Maresca, entrenador del Chelsea, consideró el triunfo del domingo en la final del Mundial de Clubes como un éxito igual o superior a la conquista de la Liga de Campeones europea.
“Esta competición, con los mejores clubes del mundo, la valoramos como la Champions (League) o si no más”, afirmó Maresca tras la rotunda victoria por 3-0 frente al Paris Saint-Germain en la final.
Lucir el emblema de campeones “en la camiseta durante los siguientes cuatro años es un orgullo”, recalcó el timonel en su conferencia de prensa en el MetLife Stadium de East Rutherford, a las afueras de Nueva York.
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Desde su llegada al banco londinense en junio de 2024, Maresca ha guiado también al Chelsea al título de la Conference League y al regreso a la Liga de Campeones tras dos años de ausencia.
En su comparecencia, el italiano aseguró desconocer los motivos por los que se desató una monumental tangana tras el partido, en la que se vio involucrado el entrenador rival, el español Luis Enrique.
“Tras el pitido final, me acerqué a Luis para hablar con él y vi que algo estaba pasando. No sé realmente qué ocurrió”, afirmó.
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El PSG, vigente monarca de la Liga de Campeones, se vio sorprendido desde el principio por la asfixiante presión del Chelsea, que ya mandaba 3-0 al descanso con dos goles de Cole Palmer (minutos 22 y 30) y otro del brasileño João Pedro (43).
“No me esperaba estar 3-0 en la primera parte”, reconoció el exjugador italiano. “Pero sí esperaba un partido donde mi equipo iba a pelear. Creo que podemos competir contra equipos de este nivel”.
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Sobre su arriesgada estrategia, Maresca dijo que su intención era obtener la máxima ventaja de su asedio inicial, ya que el fuerte calor les iba a impedir mantener ese ritmo los 90 minutos.
“Para mí, ganamos el partido en los primeros 10 minutos. Ahí fijamos el ritmo de cómo queríamos jugar”, señaló. “Después, las condiciones (climatológicas) hicieron difícil seguir jugando así hasta el final pero los chicos lo hicieron bien”.
El italiano también hizo un reconocimiento a la actuación de su joven figura Cole Palmer, elegido mejor jugador de la final y del torneo.
“Estos son los partidos en los que esperamos que él aparezca”, afirmó.
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Maresca se mostró ilusionado con el futuro de su plantilla, la segunda más joven de este Mundial con una media de 23,3 años.
El técnico, sin embargo, no quiso hacer ninguna reflexión sobre la próxima temporada ya que sólo piensa en tomar vacaciones tras estas cuatro semanas de intensa competición en el verano estadounidense.
“Por supuesto estoy muy emocionado (por el futuro), pero estoy aún más emocionado porque tenemos tres semanas libres”, afirmó. (D)
