Ecuador tendrá un cruce inédito y determinante en su segundo partido del grupo E del Mundial 2026 cuando enfrente a Curazao, la selección debutante en esta edición de la Copa del Mundo.
El combinado caribeño, surgido del bombo 4, es considerado uno de los rivales más asequibles que pudo recibir la Tri en el sorteo, aunque llegará con la ilusión intacta de sorprender en su primera participación mundialista.
Publicidad
Curazao vivirá su estreno absoluto en una Copa del Mundo, un acontecimiento histórico para la isla de apenas 165.000 habitantes. Su clasificación se dio tras un sólido desempeño en la tercera ronda de las eliminatorias de Concacaf, donde terminó puntero del grupo B con 12 puntos, superando a Trinidad y Tobago, Bermudas y Jamaica para asegurar el boleto a la gran cita de 2026.
La principal figura del equipo es Armando Obispo, defensor de 26 años perteneciente al PSV Eindhoven. Nacido en Países Bajos y formado en las divisiones juveniles de la selección neerlandesa, Obispo eligió representar a la llamada Familia Azul, reforzando una plantilla con fuerte influencia del fútbol europeo.
Publicidad
El experimentado Dick Advocaat, de 78 años, dirige al plantel y llegará al Mundial como el técnico más longevo entre todos los seleccionadores del torneo. Su vasta trayectoria, que incluye pasos por Países Bajos, Bélgica, Rusia y Serbia, será uno de los principales activos de una selección que busca competir pese a su inexperiencia.
Para Ecuador, el duelo ante Curazao es clave. La Tri no registra enfrentamientos recientes con los caribeños, pero en la previa aparece como un partido obligatorio de ganar para una posible clasificación, especialmente considerando que los otros dos rivales del grupo serán Alemania y Costa de Marfil.
La cita marcará el primer choque mundialista entre ecuatorianos y curazoleños, y uno de los momentos más simbólicos para la nación isleña, que vivirá en 2026 su primera aventura en el escenario más grande del fútbol. (D)