Fue tendencia en el Mundial de Rusia 2018: varios ciudadanos japoneses que asistieron al Rostov Arena para ver a su selección perder ante Bélgica se dedicaron a limpiar el estadio una vez que terminó el partido. Aunque sentían la tristeza de la derrota, los fanáticos de Japón no dudaron en moverse entre los asientos para recoger la basura desechada por los otros asistentes.

En el partido inaugural del Mundial de Qatar 2022, celebrado este domingo, los japoneses demostraron una vez más su tradición de dejar limpios los estadios. Cuando acabó el enfrentamiento entre Ecuador y Qatar, un grupo del pueblo asiático sacó fundas de basura para levantar todo el desperdicio que dejaron los espectadores en el suelo, incluyendo restos de comida, papeles y banderas.

Aunque este gesto es rutinario en Japón, a los ciudadanos qataríes les sorprendió la atención de los japoneses al orden y la limpieza sin importar que su selección no estuviera jugando ese día.

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Es el caso del influencer Omar Al-Farooq, que compartió en sus redes sociales los videos de los asiáticos recogiendo la basura al finalizar el partido. Uno de los japoneses le dijo que lo hacen “por respeto al país que los recibe”, y que en su país predican con el ejemplo.

La muestra de educación y respeto por el espacio compartido es algo que se inculca en las personas del “país del sol naciente” desde su infancia. En las escuelas primarias y secundarias de Japón, los mismos estudiantes limpian los edificios, turnándose para barrer y limpiar los suelos en lugar de los empleados de limpieza.

Sus buenas costumbres también provienen de un proverbio que en español se traduce así: “A medida que las aves acuáticas se desplazan a otros lugares, pasan sin ensuciar el agua ni hacer olas”. Los japoneses lo interpretan con la siguiente frase: “Debes dejar un lugar más hermoso que cuando llegaste”, y la aplican en cada instancia de sus vidas.

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(D)