Armando Paredes, conocido como el Travieso, fue una de las grandes promesas del fútbol ecuatoriano en la década del 2000. Con pasos por clubes importantes como Barcelona SC, Emelec y El Nacional, su talento en el medio campo era indiscutible.

Sin embargo, su carrera se vio marcada por varios episodios de indisciplina que terminaron frenando su proyección internacional.

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En Marca 90, el exfutbolista declaró que por tenerlo todo a muy temprana edad se volvió “loco” y no supo cómo actuar.

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“Me llegó todo rápido, con 17 años ya en la selección de Ecuador, me convocó el Bolillo (Hernán Darío Gómez) y ya estaba en la selección de privilegio. Tenía departamento, carro, dinero, todo me llegó absolutamente rápido y me volví loco”, dice Armando Paredes.

No obstante, expresó que sí hubiese querido dejar un mejor legado a la juventud. “No me arrepiento, pero sí hubiese querido dejar una huella positiva en el fútbol, porque sí tenía condiciones”, añadió.

Armando Paredes se retiró del fútbol profesional en 2015, a los 31 años, luego de su última experiencia en el club Carchi 04 FC, en la segunda categoría. Tras alejarse de las canchas, dio un giro a su vida y ahora trabaja en un estudio jurídico, aunque ocasionalmente participa en torneos con exjugadores, en los que todavía deja ver su calidad.

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Aunque su camino fue irregular, sigue siendo recordado por su talento y por ser un personaje que dejó huella en el fútbol ecuatoriano. (D)