El exmediocampista del Pachuca y actual elemento de las Chivas de Guadalajara José Castillo, rompió el silencio sobre la etapa de Guillermo Almada al frente de los Tuzos y reveló detalles del tenso ambiente que se vivía dentro del camerino.

El joven jugador aseguró que la relación entre el estratega uruguayo y varios referentes del plantel se había vuelto “insostenible”, al punto de que algunos “ya no lo toleraban más” y los roces casi llegaron a los golpes.

“Los grandes ya no lo toleraban más. Le mentaban (insultaban) la madre, casi al punto de llegar a los golpes. Es complicado lidiar con él en el día a día, los chavos (muchachos) sabíamos que, si hacíamos algo mal, iba a llegar un regaño fuerte”, apuntó Castillo durante una entrevista para el blog La Capitana, de la periodista mexicana Sandra de la Vega.

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“De cierta forma está comprobado que tiene la capacidad de sacar lo mejor de cada jugador. La exigencia es pareja: jugaba el que estaba mejor sin importar el nombre, la nacionalidad o salarios; y lo cumplía. Si trabajabas y rendías (en los entrenamientos), te iba a meter (a la cancha)”, añadió.

El futbolista apuntó que pese a los “regaños” era “alentador” tener un timonel como Almada ya que te daba esperanzas reales de poder tener minutos.

“Dejando de lado los regaños era alentador trabajar porque tenías posibilidades reales de jugar. Regañaba mucho, pero te daba la confianza de jugar. Si lo hacías bien, jugabas, y eso te daba la oportunidad de consolidarte”. indicó.

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Finalmente, sostuvo que los jugadores “no decían nada” porque se veían resultados dentro del campo de juego. “El primer año llegamos a la final y al siguiente fuimos campeones. Dices: ‘Bueno, me aguanto, no pasa nada’”, sentenció.

Al mando de Barcelona SC, entre 2015 y 2019, Almada logró ser campeón nacional de Ecuador en el 2016 y al año siguiente alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores. (D)