La imposiblidad de cumplir al 100 % con los protocolos establecidos, la falta de auspicios, la falta de escenarios y la falta de recursos para poder cumplir con los sueldos de los jugadores, fueron varios de los justificativos que expusieron este lunes varios dirigentes para que no se realice la Liga de Básquet este año.

La reunión que se realizó vía zoom, participaron delegados de varios clubes y ante la propuesta del presidente de la Federación Ecuatoriana de Básquet, José Arévalo, de que el torneo se pueda cumplir en octubre o noviembre, se aprobó realizar una próxima reunión en agosto para ver las condiciones de la pandemia del coronavirus y decidir si se puede o no realizar el torneo.

Jorge Egúez, que intervino en representación de Barcelona, señaló que al igual que en el fútbol si se decide organizar la Liga, se deberá cumplir con los protocolos que abarcan exámenes de isopado antes y después de los partidos, así como la desinfección de los camerinos, entre otras acciones y eso generaría un gasto que ninguno de los clubes estaría en capacidad de cubrir.

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Por su parte Marco Cepeda, en representación del club Guerreros de Santo Domingo, anunció que el club que él representa no participará este año porque no podrá cumplir con las normas de seguridad.

Andrés Espinoza, de Triple E, dijo que ellos tampoco jugarán por el tema de seguridad; mientras que Carlos Yturralde, delegado de LDE, añadió que es prematuro poner fecha para el inicio de la Liga y se deberá esperar otra reunión.

Leonardo Oleas, de Leones, acotó que por responsabilidad con los clubes y los aficionados hay que analizar bien la fecha sobre el inicio de la Liga porque se podría aumentar el grado de contagios.

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Carlos Guevara, en representación de Piratas, fue el único delegado que reconoció que como club estaban preparados e incluso habían participado en un torneo amistoso pero que en una próxima reunión se debería tomar una resolución sobre si se debe o no realizar la competencia.

Edwin Robles, de Punto Rojo, indicó que la Liga se podría realizar a finales de año; mientras que el técnico de este equipo, Sunyol Costa, indicó que en una encuesta realizada a 15 de sus jugadores se determinó que ellos pretenden ganar un sueldo mensual y este no podría ser menor a 1.300 dólares; mientras que el salario de los refuerzos extranjeros debe ir en relación a lo que ganan los nacionales.

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Paola Camilo, del club Oro y Grana, refirió que los equipos viven de la taquilla y propuso que se busquen otras alternativas para reactivar el básquet considerando que será difícil que haya asistencia masiva a las diferentes programaciones.

Jimmy Cedeño, que representa al Portoviejo Básquet Club, explicó las alternativas que se implementarán en la NBA, como es la de jugar en una sola sede, y propuso que se podría estudiar esta posibilidad u otra para aplicarla en el Ecuador.

En la reunión también participó por primera ocasión el equipo Ambato Soldier, con su delegado Marco Freire, quien propuso que haya una segunda reunión y que como club nuevo están ilusionados en participar.

Sergio Félix, del club Juvenil, se allanó a las justificaciones del resto de sus compañeros para que se realice una nueva reunión para analizar la posibilidad de fija una fecha para el torneo del 2020. (D)

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