Su casco amarillo con una franja azul y otra verde hizo historia en las pistas y su genio marcó a una generación que aprendió con el campeón brasileño de F1 Ayrton Senna, para muchos el máximo mito deportivo del país, a agitar con orgullo la bandera de Brasil.Cuando el piloto, con apenas 34 años, se estrelló el 1 de mayo de 1994 contra el muro de la curva de Tamburello, en el circuito italiano de Ímola, no solo enmudeció a su país natal. El accidente conmocionó a millones de personas que vieron en televisión, en tiempo real, la triste despedida del carismático y controvertido ícono.Un cuarto de siglo después, su imagen sigue asociada a marcas comerciales y campañas sociales; es el último gran ídolo brasileño, para muchos incluso mayor que el mítico Rey Pelé, gloria del fútbol.“Vivíamos los años 80, con hiperinflación, recién había acabado la dictadura militar; no tenía mucho sentido sentir orgullo de Brasil, pero Senna fue por el mundo llevando la bandera como un símbolo que enorgulleció a tantos brasileños”, dice Alexander Grünwald, periodista especializado en automovilismo.A juicio de Grünwald, el legado de Senna fue “transformar el deporte”. Su diferencial, además de ser un piloto excepcional: atender aspectos como la preparación física y mental, entender al vehículo y la tecnología y cuidar su imagen.Hoy se le consagrará al tricampeón con un ‘Senna Day’ en el autódromo Interlagos, en Sao Paulo, con actividades deportivas y culturales.En vísperas de la carrera fatal en el Gran Premio de San Marino, Senna recibió de su hermano Leonardo lo que –según Ernesto Rodrigues, autor de la biografía Ayrton, el héroe revelado– contribuiría a afectar el estado emocional del piloto.El 29 de abril, el brasileño fue testigo de un accidente, en Imola, de su compatriota Rubens Barrichello. Y al día siguiente, asistió a la muerte de su colega, el austriaco Roland Ratzenberger durante la clasificación a la carrera.Senna, con una extraña sensación que transmitió a amigos y familiares, no quería correr la carrera; pero finalmente aceptó participar.<strong>(D)</strong>