La Comisión Disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) decidió abrirle un expediente a Michael Arroyo y llamarlo a rendir declaración, luego de que se confirmó que el futbolista de Barcelona dio positivo en un control de dopaje, situación que el jugador de 31 años afronta por segunda ocasión en su carrera deportiva.

“La Comisión ha resuelto abrir el expediente respectivo y convocarle al jugador (a rendir declaraciones). Está citado para el próximo miércoles (28 de noviembre) a las 09:30”, dijo anoche Galo Sánchez, principal de dicho órgano de la FEF.

El delegado de la Ecuafútbol añadió que el representante de Arroyo se reunió ya con la Comisión Médica de la FEF y rechazó acceder al análisis de una muestra B, uno de los recursos que podría usar en su defensa.

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En tanto, el abogado de Barcelona, Jorge Reinoso, detalló que la sustancia prohibida hallada en la prueba es la hidroclorotiazida, un diurético.

“De acuerdo a lo que determina FIFA y nuestro reglamento, el jugador está ya suspendido (preventivamente). Las sanciones por dopaje son internacionales automáticamente”, agregó Sánchez.

Arroyo se expone así a una suspensión deportiva de por vida, toda vez que ya fue sancionado por dopaje en 2007, cuando jugaba en Emelec.

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Dirigencia, ‘dolida’

“Nosotros no estábamos al tanto de nada en todo esto”, dijo ayer Juan Alfredo Cuentas, vicepresidente de Barcelona, a periodistas. “Lastimosamente, si se llegase a dar y llegase a pasar (la sanción por parte de la FEF), realmente nos sentiremos muy dolidos, porque nosotros no estábamos al tanto de ninguna de estas situaciones (personales del jugador)”.

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Arroyo, quien no estuvo presente en la práctica del martes del plantel que entrena Guillermo Almada, ya había quedado en el centro de la polémica, luego de que no atendió un control antidopaje en el estadio Monumental, tras el Clásico del Astillero de octubre pasado, y se lo realizó luego en una clínica, ante el reclamo del responsable médico de Emelec.

Según habían defendido el director de la Unidad Antidopaje de la FEF, Luis Zambrano, y Luis Plúas, oficial de control de dopaje de aquel duelo entre canarios y millonarios, Arroyo incumplió el protocolo establecido por la Comisión Antidopaje de la Conmebol (el mismo que emplea la FEF) al no dar su muestra de orina tras el encuentro, alegando una dolencia física en los minutos finales del partido, el 14 de octubre.

Entonces aún se hablaba solo de un “intento de evasión” de Arroyo a la prueba.

“Lamentaríamos mucho (si hay sanción) sobre todo por la parte personal del jugador, más que por cualquier otra cosa”, agregó el segundo al mando de la institución guayaquileña. (D)

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Reglamento de FEF
Comisión Disciplinaria

El artículo número 187
La Federación Ecuatoriana de Fútbol, en sus estatutos y reglamentos 2018, establece en el artículo número 187 de la Comisión Disciplinaria que “el jugador cuyo examen de dopaje resultare positivo será suspendido por dos años; y, si reincidiere, la suspensión será de por vida”.

Lastimosamente, si se llegase a dar (la sanción a Arroyo) realmente nos sentiremos muy dolidos, porque nosotros no estábamos al tanto de ninguna de estas situaciones.Juan Alfredo Cuentas, vicepresidente de Barcelona