Reinhard Grindel, presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), criticó ayer al antiguo internacional Mesut Özil por haber rechazado la visita del seleccionador Joachim Löw la semana pasada en Londres.

“Pienso que no está bien rechazar cualquier comunicación. Me hubiera parecido bien que, después de que en un comunicado se hayan hecho críticas tan graves, se acepte también hablar”, señaló Grindel.

Ozil anunció el 22 de julio pasado, con un duro comunicado, que renunciaba a la selección germana acusando a los dirigentes de la DFB de “falta de respeto y racismo”, tras la grave polémica que se generó después de que el futbolista, de origen turco, se hiciera una fotografía con el presidente otomano Recep Tayyip Erdogan.

Publicidad

Desde entonces, Löw no ha podido ponerse en contacto con el jugador, con el que mantenía una larga relación profesional, que no ha respondido a los mensajes ni a las llamadas telefónicas. La semana pasada Löw acudió al centro de entrenamiento del Arsenal para visitar a los internacionales alemanes. Ozil no acudió y Löw no fue autorizado a entrar en la zona de entrenamiento para verlo.

Nacido en Alemania de padres turcos, Ozil fue una de las piezas claves del equipo germano que ganó el Mundial 2014. Tras su encuentro con Erdogan, fue blanco de ataques xenófobos y se habló de una supuesta falta de lealtad a Alemania. El presidente de la DFB reconoció que debieron apoyar mejor a Ozil en el momento en el que se desencadenaron los ataques racistas. (D)