La decisión de Londres de no enviar miembros del gobierno ni de la familia real al Mundial de fútbol de Rusia, del 14 de junio al 15 de julio, no tendrá impacto en la competición, aseguraron este miércoles el comité de organización y la FIFA.

"La elección de venir o no venir a la Copa del Mundo es de cada aficionado. No tendrá impacto en la calidad del torneo. Siempre hemos tenido la intención de organizarlo al más alto nivel", declaró a la agencia de prensa RIA Novosti Alexei Sorokine, al frente del comité de organización del Mundial 2018.

"Es una pena que todo el mundo no se adhiera al principio de dejar el fútbol fuera de la política", añadió.

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En un comunicado, la FIFA mostró su "total confianza en que los 32 equipos participantes y los aficionados de todo el mundo harán que este Mundial sea un evento memorable".

"En lo que se refiere a la representación administrativa o diplomática en el Mundial, corresponde a cada país pronunciarse sobre su presencia de manera independiente", señaló la instancia que dirige el fútbol internacional.

La primera ministra británica Theresa May culpó este miércoles al presidente ruso Vladimir Putin del deterioro de las relaciones, mientras anunciaba represalias contra Moscú por el atentado con armas químicas contra un exespía ruso.

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"Muchos de nosotros miramos a la Rusia post-soviética con esperanza. Queríamos una mejor relación y es trágico que el presidente Putin haya elegido actuar así", dijo May en el Parlamento.

La selección de Inglaterra es la única británica que se ha clasificado para la competición, y sus hinchas ya fueron blanco de ataques por aficionados rusos durante la Eurocopa disputada en Francia en 2016. (D)