El sueño de clasificar a un torneo internacional, meta que se trazó la dirigencia de Clan Juvenil, se convirtió en pesadilla, y a seis fechas de completar las 44 del calendario se fue al abismo. Hoy el DT Julio Asad ya delinea lo que será el plantel para competir el 2018 en la serie B.

A fines del 2016 e inicios del 2017, la directiva hizo volar sus ilusiones muy alto, y tras haber alcanzado los ascensos sin pausas armó un plantel para “pelear por una copa”, había declarado Juan Cevallos.

Mas, el combustible se le acabó antes de tiempo al novel Clan Juvenil, y Cevallos no tuvo otra opción que entregar el equipo de la familia al grupo empresarial liderado por Jorge Guerrero, representante de futbolistas. Pero ni este cambio trajo mejores días para el club de Sangolquí.

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Una suma de ‘errores’, como apuntó ayer el delantero Juan Carlos Villacrés, incidió en este desenlace.

La falta de dinero lo que ocasionó adeudar sueldos por varios meses a los jugadores y al cuerpo técnico, contratación de 71 futbolistas –según información de la Ecuafútbol–, inestabilidad en la dirección técnica (Juan Carlos Garay, Carlos Sevilla y Julio Asad; aparte del albanés Febrón Ziu, quien dijo haber firmado un contrato pero nunca entrenó), entre otros aspectos, ocasionaron la debacle del que paradójicamente se le conoce como Patrón del Valle.

En esta coyuntura, el argentino Asad dio vuelta a la página: “Es una utopía salvarnos. Estamos muy lejos”, reflexionó.

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Indicó que en el 2018 entre otros objetivos está el armar un equipo para buscar el regreso a la serie A y mostrar jugadores jóvenes que luego puedan ser transferidos.

Clan Juvenil es último en el acumulado con 24 puntos. Antes se ubican Fuerza Amarilla (28) y Universidad Católica (39). Restan seis fechas. (D)