El capitán de la selección de Brasil, Thiago Silva, aseguró hoy que la goleada por 7-1 que le propinó Alemania a Brasil en la semifinal del Mundial de fútbol le causa un dolor tan grande que no ha conseguido llorar.
"Nunca en mi carrera he sufrido una derrota tan amplia. Cualquier derrota me causa un dolor muy grande, pero por el resultado duele más, mucho más. Después de este resultado en una Copa del Mundo que todos queríamos conquistar, ni siquiera consigo llorar. El dolor es tan grande que no tengo fuerzas para llorar", dijo el defensa.
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Silva, quien no jugó el partido con Alemania por estar suspendido por doble amarilla, reveló la angustia que supuso no estar con sus compañeros y seguir desde la tribuna la peor goleada de la historia de la selección brasileña.
"En algunos momentos yo quería gritar y no podía", afirmó el zaguero del Paris Saint-Germain, quien aseguró que también se siente responsable del fracaso.
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"Todos nosotros somos culpables, no hay por qué apuntar el dedo a uno o a otro. El error fue de todos. 'Felipao' (el técnico Luiz Felipe Scolari) asumió su responsabilidad por este fracaso y nosotros asumimos la nuestra", afirmó.