Una Pantera acompaña en las prácticas a la Tricolor. El recordado goleador Ermen Benítez se muestra entre los familiares de los seleccionados que los acompañan en la Copa del Mundo de Brasil.

El exdelantero observa los entrenamientos, saluda con los futbolistas, conversa con dirigentes de la FEF y atiende los requerimientos de la prensa nacional e internacional.

Una invitación hecha por Felipe Caicedo le permitió a Benítez ser parte del viaje mundialista de Ecuador. Está él, que recibe afecto y cariño de los jugadores, pero no de su hijo Cristian, decisivo en la obtención del boleto a Brasil, pero fallecido en julio del 2013.

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“Yo veo con alegría ese cariño (de los excompañeros del Chucho); yo estoy acá gracias a ellos”, dijo la Pantera quien comparte habitación de hotel con el padre de Caicedo.

Benítez tiene un pasado futbolístico relacionado con Brasil como parte de la Tricolor que en la Copa América 1989 venció por primera vez a Uruguay en un partido oficial.

Benítez marcó el único tanto ante los charrúas. “La jugada la inició Kléber Fajardo, con un pase largo para (Raúl) Avilés. Yo entré, Avilés me miró y me dio el balón, observé al arquero y se la toqué (por arriba). Fue una alegría inmensa; un resultado que no lo esperábamos”, rememoró.

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“Antes del juego andábamos de compras y decían los uruguayos que ‘estos (los tricolores) vinieron de compras’, pero ganamos”, recordó.

Benítez señala que en el debut ante Suiza, Ecuador dará una sorpresa y expone dos razones: “Hay jugadores con roce internacional y partidos que dan confianza”. (SN)