Cerca de 3.500 personas celebraron en Heppenheim (Alemania) el cuarto título mundial de Fórmula 1 de su vecino más ilustre, Sebastian Vettel, que ganó el Gran Premio de la India y se coronó por cuarto año consecutivo.
“La gente tiene ahora una razón para beber”, dijo Vettel en los micrófonos del canal RTL a los aficionados, tras su victoria.
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“El ambiente es genial. Vettel se ha mostrado tan dominador como de costumbre”, declaró Alex Moller, presidente del club de fans de Vettel, añadiendo que en la fiesta había aficionados de toda Alemania y también de otros países, sobre todo de Suiza.
Vettel podrá ir a Vettelheim (la casa de Vettel), sobrenombre que recibe la ciudad de Heppenheim –a unos 50 km al norte de Franc-fort–, al final de la temporada y se encontrará con sus fans, que ya reclaman que Vettelheim sea el nombre oficial de la ciudad.
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Tras conseguir su cuarta corona en India, Vettel aseguró que “nunca” se imaginó en una situación como la actual. “Es uno de los mejores días en mi vida hasta ahora. (...) Si miramos los números y estadísticas que hemos hecho en los últimos cuatro años es increíble”.