Un voto cómodo, donde el ciudadano de desliga de las responsabilidades y compromisos esperando un mesías que lo rescate y le dé solución rápida a sus problemas.
(...) la comunicación no funciona de una manera lineal, aislada y previsible, ahora menos que nunca.
Es un reflejo de una sociedad que, en muchos aspectos, se ha quedado en un invierno perenne...
En silencio pensaba en lo afortunados que somos de poder reencontrarnos con estos espacios...
Entonces, solo queda investigar y denunciar, como la hacía Villavicencio, con otro tipo de esperanza.
Ahí tenemos grandes cracks. En ese grupo, hay dos que sobresalen, Juan Javier Peña y Ricardo Casal.
Mi idea aquí no es polarizar estilos de liderazgo, sino entender que el liderazgo responde a los tiempos que se viven.
Lo cierto es que nuevamente estaremos escogiendo los rumbos de la patria y la clave será la comunicación.
La inseguridad impacta en todo el tejido social de manera compleja, por eso no hay que verlo solo como un problema policial.
Felizmente o lamentablemente, la responsabilidad seguirá siendo nuestra.
“La única obligación con la que un amigo se debe comprometer con el otro es la de inspirarlo”.
Nuevas dinámicas generadas por las redes sociales y el paradigma digital, parecieran empujar a ciertas marcas a concentrarse más en los fenómenos inmediatos.
Y si tú no has encontrado todavía tu propósito o el sentido de la vida, no pasa nada, ese puede ser tu propósito para el próximo año. Es broma. Feliz año.
El arte en espacios formales pareciera haberse distanciado de los guayaquileños de la calle... ¿Cómo los acercamos?
El resentimiento y la resignación tienen mucha presencia en nuestros discursos y nos ponen en una posición poco favorable.
¿Se ha priorizado la libertad por sobre la responsabilidad? Me pregunto, sin tener una respuesta clara.
Oír otras experiencias que hablan de sobreponerse a contextos complejos puede ser el punto de partida para una nueva conversación.
Mi admiración y respaldo para este grupo de mujeres, que empezaron en los años 80 con un grupo denominado Teatro Experimental Guayaquil.
Si bien la impotencia y el miedo nos inducen a demandar un control inmediato de la situación, es necesario, también, trabajar sobre soluciones.
Rompe los paradigmas de lo que uno esperaría del periodismo y los periodistas, tal vez, en lugar de romperlos, los surfea.
Tenemos demandas urgentes, pero es utópico endosar la responsabilidad de las soluciones solo a un presidente y su equipo...
No hemos terminado de usar las mascarillas y ya volvimos a nuestra clásica normalidad, la de todo aquello que cambiaría.
El otro, en redes sociales, pareciera perder su condición humana y ser solo un espectáculo a merced de nuestras pasiones.
Hay que exigir seguridad, pero también hay que empezar a pensar en otras preguntas y tener otras conversaciones.
¿Seríamos nosotros esa generación que se abra y ceda para pensar verdaderamente en todos los otros?
Las nuevas generaciones buscan experiencias más inmersivas en internet, y eso se va a empezar a reflejar en todo lo que hacen.
Siempre agradeceré tu generosidad, tu visión honesta y coherente y tu inagotable capacidad para inspirar.
Es inconcebible que para poder montar un proyecto que dure más de cuatro años haya que tener una suerte de dictadura.
Hechos de la fábrica misma del sueño nacieron los Cuentasueños como un esfuerzo para alcanzar las mentes de los mortales...
Si lo que se critica es un comentario que incita a la violencia, la forma de hacerlo también se ha excedido.