La ministra de Salud, Carina Vance, pidió la despatologización de varias categorías y subcategorías de la identidad de género, como el transexualismo. Lo hizo a través de un oficio remitido el 26 de diciembre pasado a la representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ecuador, Celia Riera. Su objetivo es que se excluya el transexualismo y algunas de las categorías de la identidad de género de los manuales de psiquiatría de la OMS.

Vance, en representación del Estado, basa su pedido en los principios de igualdad, equidad y justicia establecidos en la Constitución, en tratados internacionales y en la Carta Universal de Derechos Humanos.

Afirma actuar en defensa de los derechos de los “grupos más vulnerables, discriminados y excluidos”.

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Para las organizaciones GLBTI del Ecuador, la acción de Vance no solo responde a la reivindicación de derechos de una minoría trans, sino que identifica la fidelidad a su condición de reconocerse lesbiana.

En cambio los movimientos profamilia, como 14 Millones, ubican a Vance como parte del grupo de personas que se han “infiltrado en puestos estratégicos del poder” para cumplir intereses personales. Por ello han pedido su renuncia.

Vance fue designada como ministra de Salud el 13 de enero del 2012 y entre sus primeros anuncios dijo que trabajaría para el cierre definitivo de las llamadas clínicas que ofrecen curar supuestamente la homosexualidad.