Kimi Raikkonen hizo ayer una carrera brillante para ganar el Gran Premio de Australia con Lotus en un emocionante inicio de la nueva temporada de Fórmula Uno en el circuito de Albert Park, en Melbourne.
El finlandés, campeón del mundo en el 2007, cabalgó hacia la victoria con una estrategia de dos paradas en boxes y cruzó la línea de meta 12,4 segundos por delante del Ferrari del español Fernando Alonso.
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El triple campeón mundial, el alemán Sebastian Vettel, quedó en tercera posición con su Red Bull tras luchar con el desgaste de los neumáticos durante toda la carrera.
Algunas lluvias ligeras contribuyeron a dar emoción a la carrera, en la que los principales pilotos se enzarzaron en intensas batallas que hacían cambiar con sorprendente frecuencia las primeras posiciones.
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Siete coches lideraron la carrera en algún momento pero después de que Raikkonen se pusiera al frente por segunda vez en la vuelta 43, parecía que solo un problema mecánico le iba a impedir ganar su vigésimo gran premio para empatar en el recuento global con su compatriota Mika Hakkinen.
“He tenido un coche muy bueno todo el fin de semana”, dijo Raikkonen, expiloto de McLaren y Ferrari, que regresó a la Fórmula Uno en el 2012 tras pasar dos años en los rallys, en el podio de campeones.
Por eso, Raikkonen declaró tras su triunfo que está “contento con esta victoria”, aunque “aún queda mucho por hacer”.
“He hecho una buena salida y he ido bien desde ahí, sin mayores problemas con los neumáticos”, explicó.
El año pasado, después de pasar dos en el Mundial de rallys, Raikkonen ganó el Gran Premio de Abu Dabi. “Tenía dudas, porque era la primera carrera y no sabes cómo vas a ir y cómo se iban a comportar los neumáticos, porque durante el invierno no hicimos muchas tandas largas. Pero sí sabía que el coche iría bien”, comentó Kimi durante la ceremonia del podio, en la que ejerció de maestro de ceremonias el expiloto británico Martin Brundle.
“Tenía la sensación de que podía ser una buena carrera, pero, obviamente, hay que cubrir las primeras vueltas y seguir a partir de ahí”, comentó el piloto de Espoo.
“Fernando (Alonso) se acercaba y había tráfico, así que intenté asegurarme por si empezaba a llover. El coche se comportó bien. Estoy muy contento con esta victoria, pero aún queda mucho por hacer”, manifestó Raikkonen.
Por su parte, el segundo, Alonso, se mostró optimista por las posibilidades de Ferrari en el 2013. “Ha sido una carrera fantástica, con luchas en todo momento. Lo disfruté personalmente. Solo nos ha faltado la victoria para poner la guinda, pero Kimi estuvo fantástico, así como el monoplaza de Lotus”.