La calma volvió, al menos temporalmente, a los habitantes de la cuenca del río Portoviejo, al conocer que el nivel de riesgo de la represa de Poza Honda bajó considerablemente entre el viernes y ayer al mediodía. Esto a raíz de que ha dejado de llover en la zona montañosa del cantón Santa Ana, en cuya parte alta se halla la presa.
Orfa Cabezas, de la Subsecretaría de Gestión y Riesgo, (SGR), indicó que hasta ayer al mediodía el agua de la presa llegó a nivel normal y que ya no está expulsando por el vertedero. Hasta las 10:00, el nivel bajó a 106,9, “lo que es normal y el temor de que se registre una inundación por el rebose de la represa por ahora pasó”, dijo.
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Explicó que el nivel óptimo para que haya riesgo es de 105,5 metros. “Lo bueno es que el agua ya no está por encima del vertedero. Esto pasa todos los años, por lo que la ciudadanía debe mantener la calma, pues el monitoreo del aumento de caudal es constante”, expresó.
En cambio, la realidad de Charapotó, parroquia de Sucre, es difícil, ya que el agua continúa llegando y ha inundado sectores como Correagua y el Bebedero.
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“Aquí nos inundamos por el agua que viene desde Santa Ana y del río Portoviejo, porque aunque no esté lloviendo, sigue corriendo y anega la parroquia”, refirió Antonio Ureta, dirigente campesino del sector.
Como medida, explicó que el viernes pasado tuvieron que romper la vía Crucita-Portoviejo para que el agua corra y provoque menos inundaciones. “Ojalá así continúe sin llover, porque la situación es difícil, y para que las autoridades nos ayuden, debemos esperar meses”, dijo Mario Cevallos, comunero de Charapotó.
Cabezas señaló que la situación de Chone es favorable, pues está bajando el nivel del río. “Allá enviamos una bomba flotante de 42 pulgadas, para que el agua sea evacuada de manera más rápida”.
En este cantón, por las últimas inundaciones del 4 y 5 de marzo, según un informe de Octavio Castillo, secretario del COE cantonal, hasta ayer se encontraban 168 personas albergadas en el colegio Oswaldo Castro Intriago, en el Miduvi, escuela Hidalgo y escuela UNE, Junta parroquial de San Antonio y escuela Morales Ascázubi de la misma parroquia.
Además, 35 familias están en albergues definidos y 42 en hogares acogientes.