Viva Guayaquil cumple hoy su edición número 100.El 14 de abril del 2011 se publicó la primera edición del semanario en el que se hizo un recuento histórico de cómo surgió la Alborada, una de las ciudadelas más grandes del norte de Guayaquil y principal motor comercial de este sector.Desde entonces Viva Guayaquil se ha convertido en el vocero de sus moradores, de los problemas que los aquejan y de sus logros en diferentes áreas. Así también se cuentan historias de sus personajes y se informa sobre alternativas de entretenimiento y diversión. Comités barriales, instituciones y fundaciones de carácter social, entidades educativas, etcétera, han tenido acogida en estas páginas.Sobre Viva, el residente de Sauces I, Luis Sandoval Cueva, manifiesta: “En reiteradas ocasiones ayudaron a mi sector con denuncias y la respuesta ha sido inmediata”. Uno de esos casos que Luis denunció fue el 24 de julio del año pasado, cuando la obra de regeneración urbana de un parque de Sauces I, de la manzana F15, fue abandonada y los moradores tuvieron que pasar a oscuras las fiestas julianas. Semanas más tarde, el Municipio de Guayaquil retomó la obra y culminó el parque gracias a una fotodenuncia que publicamos.Servio Lima, presidente de la Fundación Solidaria Adultos Mayores Proactivos y Profesionales (Ampro), ubicada en el edificio M-1 de la Alborada, 4ª etapa, expresó su agradecimiento por resaltar los objetivos de Ampro. Luego del reportaje a esa fundación, Ampro recibió múltiples llamadas telefónicas y visitas en sus redes sociales de personas de la tercera edad que estuvieron interesadas en sumarse a esta iniciativa, manifiesta Servio Lima.Gladys Coello de Alvarado, presidenta del comité de moradores de Sauces II, recuerda cómo con un reportaje realizado por las fiestas octubrinas del año pasado se logró unificar más a sus moradores, porque en la comida criolla que organizaron se vio la unión y fue una bonita experiencia la que vivieron.En Samanes IV, la vicepresidenta del comité de moradores, Idilia Espín, se muestra satisfecha por la labor de este semanario. “Luego de la publicación de Viva Guayaquil, los habitantes se acercaron al comité para demostrar su predisposición a las actividades que realizamos, en especial en lo que respecta a la seguridad y por eso haremos una minga entre moradores y miembros de la Policía Nacional para mejorar nuestro sector y evitar la delincuencia”.Algo similar ocurrió en el parque del centro comercial Gran Albocentro de la Alborada 12ª etapa. Este parque se encontraba oscuro debido a que el Municipio no arreglaba las 40 luminarias. Un día después de la publicación, trabajadores municipales solucionaron el inconveniente que logró iluminar por las noches el parque, evitando así actos delictivos. Lorena Espinoza, directora del Centro Psicoeducativo Isaac, de la Alborada, que atiende a niños autistas, dice: “Viva me ayudó a difundir los servicios de este centro y a que nuevos niños que padecen este problema se beneficien”.<b>Opiniones</b>“El periódico llenó un vacío que tenía el sector. Ayuda a los barrios a hacerse escuchar. Creo que seguirá creciendo”.<br />HUGO CHALÉN,<br /><b>residente de Samanes I</b>“Es muy importante que el Viva nos haya dado la atención necesaria a nuestros problemas, porque eso nos ayuda a resolverlos”.<br /><b>LUIS COBOS, morador de Acuarela del Río</b>“El semanario permitió dar a conocer de manera gratuita los servicios y eventos que tenemos en nuestra fundación”.<br /><b>PRISCILA ALCÓCER, directora de Ecuaquem</b>“En la sociedad moderna es vital estar informados y Viva Alborada nos da a conocer al vecino de la esquina, nos muestra tal cual somos”.<br /><b>RICARDO ESPINEL, director de Escenario Rock</b>