Medio centenar de personas entre estudiantes, amigos y familiares de los 12 estudiantes del Colegio Central Técnico detenidos por protestar fuera del centro de educación el 22 de febrero pasado, marcharon este martes desde el parque El Arbolito (centro norte de Quito) hasta la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía, a pocas calles del lugar .
Ellos exigen la liberación inmediata de los estudiantes que están recluídos en el Centro de Detención Provisional (CDP) de Pichincha acusados del delito de rebelión.
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Pero en la Fiscalía ningún funcionario les recibió y de ahí se dispersaron.
Lady Morales, presidenta de la Federación de Estudiantes Secundarios del Ecuador (FESE), quien también estuvo presente en la marcha, solicitó que no se les acuse de terroristas "porque son jóvenes que protestaron por sus derechos y por recibir una educación de calidad".
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El abogado de los alumnos del Central Técnico, Patricio Armijos, relató que los doce están afectados sicológicamente por compartir las celdas con detenidos de peligrosidad. Varios de ellos denunciaron que sus pertenencias fueron robadas y otros se han dedicado a ayudar administrativamente al CDP para pasar las horas.
Padres de familia insisten en que sus hijos ya pagaron su error de protestar tanto económicamente como con días de cárcel e insistieron en una pronta libertad.