Katherina Patricia Lazo Amores
licenciada en psicología clínica, Guayaquil.- El miércoles 13 asistí a un evento de premiación del Secap (Servicio Ecuatoriano de Capacitación Profesional) a empleadas domésticas por seguir los cursos.

Al inicio del acto nos invitaron a ponernos de pie y entonar el Himno Nacional del Ecuador; ¡oh sorpresa!, se escuchó una canción con la letra del himno, mas no con su música. Los presentes, entre los cuales estaba un ministro, no pudimos cantar ya que no tenía la melodía o música original creada por Antonio Neumane, sino que era una mezcla pop (y con video) similar a la propaganda de la revolución ciudadana. Pensé, ¡este no es mi himno! Me parece una falta de respeto que en un acto de esta magnitud no se respete el gran valor que tiene la composición original; el himno de una nación es sagrado, no debe usárselo como publicidad, cambiarlo, ni hacerle retoques de ningún tipo.

Katherina Patricia Lazo Amores,
licenciada en psicología clínica, Guayaquil