FREDDY MACAS
CAMILO PONCE ENRÍQUEZ, AZUAY.- Hoy estaba previsto que concluyan los trabajos de búsqueda de posibles víctimas en el deslave que se produjo la madrugada del pasado jueves y que deja once fallecidos.
No obstante, a eso de las 18:00 de ayer, el Comité de Operaciones Emergentes (COE) de Azuay resolvió que los trabajados de remoción de escombros seguirían hasta mañana. “Vamos a remover todos los escombros y con eso descartamos cualquier víctima que haya quedado en la zona cero”, aseguró Galo Sánchez, director provincial de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) de Azuay.
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El cambio obedece a la insistencia de mineros que creen que hay mas víctimas entre el lodo. Desde hoy se realizarán inspecciones a otras áreas mineras que representan riesgos por el fuerte invierno.
Los miembros del COE ayer recorrieron y analizaron el estado del terreno y el riesgo que representa para las labores mineras que se cumplen en los alrededores de la zona afectada.
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En tanto, la mesa de información seguirá funcionando en el destacamento policial de este cantón. Familias peruanas ayer se acercaban a la Policía y Fiscalía para pedir información de sus parientes. “Estamos elaborando una lista de posibles personas desaparecidas, pero no necesariamente de las que estaban en la zona del deslave”, dijo Sánchez.
En el Liceo Austral de este cantón fueron albergadas 37 personas que vivían cerca del sitio del deslave. “A la zona no van a poder acceder (esas familias), descartamos que se pueda reanudar las actividades mineras y peor vamos a dejar que haya asentamientos poblacionales en este sector (Pueblo Nuevo)”, agregó el funcionario.
Hay fracturas y fisuras en la parte alta del cerro y podría verse afectado por las lluvias. Estas personas vivían en campamentos improvisados, sus familiares trabajan en las minas y se establecieron en estos lugares, “ellos deberán regresar a su sitio de origen”, recomendó.
La tarde del domingo se retiraron los equipos de élite y personal de los organismos de socorro como Cruz Roja, Bomberos, SNGR, GOE, GIR del sector del peaje de Río Siete, donde planificaron el rescate. Ayer, las labores continuaban con personal técnico de la mina Pueblo Nuevo y una retroexcavadora de la Cooperativa minera Bella Rica.
Melfor García, minero de la zona, cree que hay muchas víctimas que no han sido halladas en los escombros del deslave, que taponó el campamento donde dormían decenas de obreros y por eso pide que continúe la búsqueda. “La mayor parte eran peruanos y ni siquiera la mitad corrió, el resto quizá murió y todavía no los encuentran”, advirtió.
Devis Sullon, peruano de 21 años, afirmó que unos amigos le dijeron que 40 compatriotas estaban aplastados en el lodo.