Treinta minutos duró la nueva audiencia en la que el juez subrogante de la Corte Provincial del Azuay, Luis Urgilés, negó el amparo de libertad solicitado por el abogado de Javier Ortega, imputado como encubridor en la muerte de Juan Antonio Serrano, hermano del ministro del Interior, José Serrano.
Tíos, abuelo y otros familiares del imputado asistieron a la audiencia, que se desarrolló en el auditorio Simón Bolívar, del edificio antiguo, en donde funciona la presidencia de la Corte de Justicia del Azuay.
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Urgilés asumió las funciones subrogantes porque el amparo debía ser conocido por la Presidencia de la Corte, que desde el viernes la asume José Ricardo Serrano González, padre del ministro y de la víctima.
Raúl Muñoz, tío de Ortega, dijo que saben “ahora que el papá (de Juan Antonio) es el presidente de la Corte. Se ve que estamos contra gente poderosa que hacen de árbitro. Teníamos expectativas remotas, pero como van las cosas, no podemos perder la fe en la justicia”.
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Los familiares consideran injusto que Urgilés justifique lo actuado por el juez Fernando Loyola, quien determinó la prisión de Ortega, pese a que el Código Penal determina como medida cautelar la prisión solo para autor y cómplices, no así para encubridores, y comentaron que acatarán lo resuelto. El abuelo Luis Ortega pidió un proceso apegado a la ley.