Sobre información
En la información ‘En Sala Penal se retomó proceso contra Rosero’, publicada el sábado 15 de septiembre del 2012 en la sección Actualidad del Diario EL UNIVERSO, al respecto –y por haber sido yo aludido– el periodista que acogió a Rosero para interesarse por un juicio que se inició hace más de seis años, no debería, por elemental lógica, insinuar siquiera que se trata de “una persecución política” en contra de este sujeto.

El proceso en el que está llamado a juicio Rosero en dos sendas providencias, la primera dictada por la jueza 14ª de Garantías Penales de Pichincha (23 de diciembre del 2009), y la segunda, confirmada por los jueces titulares de la Segunda Sala de Garantías Penales de la Corte Provincial del mismo distrito (el 11 de octubre del año 2010) tiene como antecedente la contundente acusación que formuló la Fiscalía en contra del autor del delito sancionado por el artículo 202.1 del Código Penal.

El expresidente del Consejo de la Judicatura Ramiro Cevallos fue, al igual de quien su padre que vive prófugo en Panamá, quienes inauguraron conjuntamente con Rosero, el más escandaloso fraude procesal que en materia penal haya registrado la historia de la justicia ecuatoriana.

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El fraude consistió en nombrar a exguardaespaldas y vendedores de libros que viven y residen en el cantón Pedernales, como “conjueces” de la Corte Provincial de Pichincha, prohibido expresamente por el artículo 100, numeral 10 del Código Orgánico de la Función Judicial.

Estos mataron la Constitución, la ley y lo que consta en el proceso, al “revocar” en un mismo nivel –segunda instancia– el auto confirmatorio de llamamiento a juicio, dictado en contra de Rosero por los jueces titulares de la Segunda Sala. En su lugar, dizque calificaron de maliciosa y temeraria mi acusación particular.

Esos “conjueces”, que por su actuación fueron destituidos, “salvaron” momentáneamente a Fernando Rosero de la pena que deberá cumplir.

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Benjamín Cevallos, como es público y notorio, no accedió a la Corte Nacional, merced a la impugnación que presenté por los mismos hechos narrados; y los Isaías, bien campantes en Miami, dando órdenes y pagando a sus testaferros en el país.

La inmoral actuación de los “conjueces” amigos de Rosero y Cevallos fue declarada nula judicialmente aunque, al igual que el multimillonario expolicía Dávila, mandante de Rosero, consiguieron de jueces venales todavía enquistados en la Función Judicial, dizque sentencia en mi contra por “injurias”.
Carlos Julio Bravo Macías,
doctor en Jurisprudencia, Quito

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Nota de la Redacción:
La versión del doctor Bravo que consta en los escritos que presentó en el mencionado proceso, también fue recogida en la nota que publicamos.

Iluminación de puente
Con relación a la noticia ‘Lámparas apagadas y mínima custodia por el puente zigzag’, publicada el lunes 17 de septiembre en la sección Gran Guayaquil, aclaro que el puente en ningún momento ha dejado de estar iluminado en su totalidad.

Y para su cuidado se mantiene en forma perenne, las 24 horas, a tres guardias localizados a lo largo del puente, dando seguridad al sector. Al momento desconocemos que se hayan presentado casos de asaltos, como se menciona en uno de los párrafos de la referida publicación.
Wilfrido Matamoros Morla,
ingeniero, gerente general de Fundación Municipal para la Regeneración Urbana Guayaquil Siglo XXI, Guayaquil

Nota de la Redacción:
El martes 4 de septiembre, a las 20:00, un equipo periodístico de EL UNIVERSO constató personalmente que el puente zigzag no estaba iluminado.