Copio el concepto de quien hace ya algunos años denunció y reclamó por todos los medios posibles que nuestros gastos de consumo de electricidad eran en parte muy elevados debido al “foco ladrón”. Hoy, ya casi no podemos prender ningún aparato de consumo de energía eléctrica, porque parece que todos esos equipos modernos y sofisticados solo consumen más energía. Ahora han colocado en la mayoría de nuestro hogares un “infalible y moderno” medidor, al que denomino “medidor ladrón”, porque en verdad nos está robando lo siguiente: calidad de vida en la Costa, porque ahora debemos morirnos de calor. Calidad en la tranquilidad de nuestros hogares, porque ahora debemos abrir más ventanas para que entre mucho viento..., y ladrones. Calidad en nuestro presupuesto económico, porque ahora debemos hacer milagros para pagar las planillas del servicio de energía eléctrica, y que no nos corten el servicio. Calidad en nuestra alimentación, porque hoy comemos menos para poder pagar las infalibles cuentas del “moderno” medidor.

Cada vez que reclamo a la empresa correspondiente me dan tantas explicaciones de sus excelencias en equipos, de su manejo profesional, de su honorabilidad, etcétera; que mejor me retiro con la ilusión de esperar la próxima planilla con precios y consumos justos, acordes a los conceptos de decencia que cada vez se pierden más en ciertas instituciones, las que en vez de dar excelencia en servicio para una mejor calidad de vida de los clientes o usuarios, se la roban.

Asambleístas, Contraloría de la Nación, universidades especializadas en el tema, tienen que intervenir junto con la Policía para que metan preso al “medidor ladrón” porque nos roba todos los meses, y cada vez mucho más.

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Acabo de recibir mi nueva factura del medidor y continúa el alza sistemática sin que nadie haga algo por impedirlo. Es increíble que las tarifas de energía eléctrica estén cada vez más elevadas. Yo controlo bien el consumo de energía en mi hogar, pero solo en este país se da el fenómeno de que mientras más uno apaga, más uno consume. Los usuarios que se sientan perjudicados que se unan en el reclamo; estamos siendo esquilmados.

Alfredo Zunino González,
Guayaquil