Se suspendió el uso de los famosos chalecos para motociclistas. Compraron 1’200.000 chalecos para solo 155.000 motos registradas, a un pequeño costo de 10 millones de dólares. ¿Quién pregunta o da razón de los 10 milloncitos que ya están bien tragados y digeridos?
Y así sigue la cadena de escándalos y corrupción que a diario nos enteramos por la “prensa corrupta”; ¡“corrupta” porque destapa la olla de grillos, ya que ciudadanos de mentes lúcidas, corazones ardientes y manos limpias quieren acallar a como dé lugar! Otro de los peores errores fue expulsar a la Base de Manta, desde ese día el narcotráfico se ha incrementado a dimensiones inimaginables trayendo consigo el sicariato; los crímenes por la lucha de espacios.
La apertura de las fronteras para que entre quienquiera sin necesitar visa, fue abrir corazones ardientes y manos limpias a cuanto rufián y mafioso no podía ya ejercer su inmundo oficio en su nación, a un país que los recibe amorosamente. La corrupción campea.
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La rara vez que tengo la mala suerte de escuchar al ciudadano Correa en algún extracto de un noticiario (porque no me da tiempo a cambiar de canal) lo oigo pronunciar la palabra “corrupción”, esa palabra debería abolirla de su vocabulario ya que aquí en Ecuador no importa que los niños atiendan las clases en el campo sobre el monte, o en las cocinas de casuchas alquiladas; mientras ciertos no saben en qué gastar el dinero de todos nosotros.
Así la patria avanza y el escándalo de cada semana termina tapando el de la semana anterior.
Lourdes Meloni de Rojas,
Guayaquil
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