En la ciudad de Quito se inició este martes una campaña contra el acoso sexual en el sistema de Trolebús y Ecovía, donde ha sido más evidente este tipo de agresión hacia las mujeres.
¡Quiero andar tranquila, calles sin acoso!, así se denomina a esta campaña que tiene como objetivo eliminar el acoso sexual callejero que se manifiesta en miradas, frases y toqueteos.
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La estrategia, cuya idea se inició a comienzos de este año, busca crear conciencia ciudadana para que las mujeres respondan ante el acoso.
"(Que) las mujeres se sientan absolutamente apoderadas con los mensajes que estamos construyendo para tengan un No más firme frente a una agresión y que no tengan vergüenza de decirlo; y por otro lado, generar una respuesta solidaria", indicó el concejal Norman Wray.
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Dos actores realizaron una representación sobre los casos que se registran en los buses.
"Hay hombres más que todo muy patanes, como les comento, a quienes uno les dice que se hagan un poquito a un lado, pero no (obedecen)", denunció una usuaria.
Para las mujeres siempre ha sido un problema utilizar el transporte público. Más de 500 funcionarios de medios de transporte recibieron capacitación para apoyar a las usuarias ante estos casos que constituyen una forma de violencia.
"Si una mujer es agredida y dice: 'no me morbosee, no me manden mano, no me insulte', que la gente reaccione y le diga sabe que señor, deje de ser malcriado, bájese del bus", agregó Wray en Ecuavisa.
