QUITO
.- "No le pongo alarma a mi carro porque no creo que los ladrones se fijen en él"; "La vejez de mi auto es el mejor repelente para los delincuentes"; "Alguna vez hasta me olvidé de cerrar las puertas de mi automóvil San Remo del 85 y no pasó nada".
Esas fueron ¬entre otras¬ las respuestas que dieron los propietarios de carros de modelos no tan modernos al consultarles sobre si creen que su auto sería el blanco de los delincuentes que pretenden robar partes de estos o el carro completo.
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El jefe de la Brigada de la Propiedad de la Policía Judicial de Pichincha (PJ-P), mayor Silvio Dávila, sostiene que desde hace algún tiempo atrás el delito de robo de carros se mantiene con tendencia a la baja, pero aclara que ha sufrido un desplazamiento "novedoso"; es decir, los delincuentes ahora no solamente roban partes o carros nuevos, sino que han creado un mercado paralelo para la venta de piezas y autos enteros de modelos antiguos.
El oficial explica que este desplazamiento se lo ha identificado mediante un análisis de la delincuencia que opera en esta área, realizado por la PJ-P.
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"No podemos hablar de que existe un número mayor de robos contra carros viejos versus el robo de carros nuevos. Lo que hemos notado es que existen mayores denuncias del robo de autos modelo 90 hacia atrás y esto alerta para adoptar medidas", manifestó Dávila.
Según el Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana (OMSC), entre enero y mayo del 2011 existieron 1.012 denuncias por el robo de carros y motos en la capital. En enero y marzo se reportaron más delitos de esta clase (216 al mes).
En un comparativo sobre este delito, la cifra de denuncias en el 2011 es menor que las registradas en los mismos periodos del 2009 y 2010: 1.028 y 1.179, respectivamente.
El mayor Dávila afirma que el servicio de estadísticas de la PJ-P está aún cotejando los datos que posee para tener en claro cuántos vehículos nuevos y viejos son robados por mes en la capital. Por el momento, dijo, se analiza la existencia de una sola banda que estaría dedicada al robo y comercialización ilegal de vehículos viejos.
El lunes pasado, la Brigada dirigida por Dávila llegó hasta un taller mecánico en el interior de la urbanización Puente de Piedra, ubicada en la vía antigua que une a las poblaciones de Conocoto y Amaguaña, a 40 minutos al suroeste de Quito.
Allí se descubrieron tres automóviles que días antes habían sido reportados como robados: uno marca Fiat del año 99, de color rojo, placa PKP-892; un San Remo año 85, color vino, placa PPW-831, y otro San Remo color azul, placa PLN-621.
Durante el allanamiento a la mecánica, Luis Castañeda, de 46 años, conducía el Fiat rojo. Al solicitarle documentos de propiedad del vehículo, el hombre respondió que estaba realizando una prueba al carro ya que pretendía comprarlo y que el verdadero dueño estaba en una tienda cercana. Los agentes procedieron a verificar el dato y no hallaron a nadie en el lugar indicado por el sospechoso.
La idea de que el hombre detenido pertenecería a una banda dedicada al robo de carros antiguos creció cuando la dueña de la mecánica, Martha Suntaxi, contó a las autoridades que los dos San Remo que estaban en su local fueron dejados hace algunas semanas por Castañeda. Al momento el individuo se mantiene con orden de prisión preventiva, cuando se le realizó la audiencia de flagrancia no tuvo sustento para defenderse ni documentos que demuestren que los vehículos eran legalmente adquiridos por él.
El mayor Dávila sostiene que los delincuentes optan por robar autos viejos, debido a que estos carecen de los sistemas de seguridad (seguimiento por satélite, marcación de partes, bloqueos eléctricos y manuales, entre otros) que sí se colocan en los vehículos modernos.
También resalta como razón para la sustracción, la facilidad en la venta de este tipo de repuestos si se los desguaza (desbaratan los carros que roban para vender las piezas), la poca complicación al ocultarlo, así como el bajo costo que tienen estos carros en el mercado.
Los automóviles tipo Fiat Uno, Suzuki Forsa I y II y los Chevrolet San Remo son los más apreciados por las bandas que sustraen vehículos de modelos antiguos, según las denuncias que se receptan.
Datos de la OMSC revelan que esos automóviles son los más robados en Quito (405 entre enero y mayo). A continuación están las motocicletas (300); le siguen los todoterreno o 4x4 (142), y luego están las camionetas (137).
"Un carro viejo, incluso a un policía no le da ganas de revisarlo. En la calle tampoco nos llaman la atención por lo que son de fácil traslado. Unos pequeños cambios y a la calle para la venta. En estos carros (los delincuentes) no ganan mucho, pero van juntando dinero seguro y casi sin riesgos", reflexiona un agente de inteligencia que se dedica a investigar este tipo de delitos en Pichincha.
Horarios
Según el Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana (OMSC), entre las 19:00 y las 22:00 de los días miércoles y sábados son los horarios en los que se dan la mayoría de robos de vehículos viejos.
Sectores
La administración zonal Norte, en norte de la ciudad, y la administración zonal Eloy Alfaro, en el sur, son los sectores en los que más denuncias de robo a automotores se registran dentro de la capital.
Denuncias
Si es víctima de robo de su vehículo reporte de inmediato el hecho al número telefónico 101 de la Policía Nacional; además, acuda de inmediato a las distintas oficinas que la Fiscalía tiene en Pichincha, donde se investigará el caso.