Eduardo Rodríguez Coll
director del Semanario El Nuevo Globo, Bahía de Caráquez.-
Si alguien pretende mancillar el nombre de don Carlos Pérez Perasso,
probablemente se deba a que no conoce la estatura moral e intelectual
de un hombre excepcional, al que la historia ya ha juzgado como uno de
los baluartes del periodismo nacional. Es inexplicable que un jefe de
Estado incurra en el error de emitir opiniones que contrarían los dotes
de serenidad, que deben caracterizarlo. Para sus hijos Carlos, César y
Nicolás, igual que para sus respectivas familias, nuestro apoyo
solidario en esta circunstancia de hondo pesar, porque se irrespeta la
memoria de su progenitor; este testimonio es extensivo a aquellos que
siguen emitiendo sus orientaciones periodísticas, pese al oscurantismo
del momento. Hacen bien proclamando su inquebrantable decisión de no
callar ante ninguna amenaza. Estoy convencido de que la sensatez
seguirá siendo la norma suprema con la que se conduzcan en su talentosa
y patriótica labor periodística.
Publicidad
Eduardo Rodríguez Coll,
director del Semanario El Nuevo Globo, Bahía de Caráquez