AFP
MADRID.- Los miles de manifestantes congregados desde hace horas en la Puerta del Sol de Madrid estallaron de alegría este viernes al dar la medianoche, momento en que entró en vigor la prohibición de las protestas durante dos días debido a las elecciones del domingo.
Al sonar las 12 campanadas en el mundialmente conocido reloj de la Puerta del Sol, los cerca de 20.000 manifestantes respetaron un silencio absoluto, sentados con las manos en alto y algunos con un adhesivo en la boca, tras lo cual estallaron en gritos y silbidos.
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"El pueblo unido jamás será vencido", "Ahora somos todos ilegales", "Que no, que no, que no nos representan" y "¡Policía, únete!" eran algunos de los eslóganes que coreaban.
Unas 19.000 personas participaban en la protesta, según un cálculo de la empresa Lynce para la agencia de noticias española Efe.
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El ambiente festivo en la plaza de la Puerta del Sol recordaba al de cada Nochevieja, cuando miles de personas se reúnen para celebrar el Año Nuevo comiendo las 12 uvas, acontecimiento que es seguido por televisión tradicionalmente en casi todos los hogares españoles.
A medianoche concluyó la campaña para las elecciones locales y regionales del 22 de mayo y entró en vigor la prohibición de la autoridad electoral de manifestarse el sábado y domingo en España para no interferir en estos comicios.
El gobierno socialista español, aunque indicó que decidirá "en función de los acontecimientos" si envía o no a la policía a dispersar ésta y otras manifestaciones que se celebraban en muchas ciudades de España, dio a entender que no procederá a desalojos.
Los manifestantes de la Puerta del Sol, cientos de los cuales han acampado en el lugar día y noche, pretenden permanecer allí hasta el domingo.
La concentración de este viernes era bastante más numerosa que las mantenidas desde el domingo, primer día de estas protestas mayoritariamente de gente joven que pide un sistema político y económico más justo.