Miriam Bernabé esperaba ayer en el hospital general Liborio Panchana la recuperación de sus dos hijos pequeños y de su progenitora, llevados con fuertes dolores estomacales producidos por un alimento ingerido en un agasajo que realizó el Centro Municipal del Niño y la Familia de Santa Elena la tarde y noche del viernes.
“Mi madre comenzó a gritar del dolor, luego mi hija y mi niño... me dijeron que lo único que habían probado era un sándwich en la fiesta”, señaló Bernabé. Al sitio acudieron unas 2.000 personas. Según datos del hospital de Santa Elena, desde las 04:00 de ayer empezaron a ingresar a esta casa del Ministerio de Salud personas con cuadros clínicos similares, la mayoría adultos mayores.
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Hasta el cierre de esta edición, el número de personas que llegó a este centro por esta causa sobrepasaba los 50, los cuales señalaron haber estado en el festejo y haber ingerido el sándwich con mayonesa que les fue entregado como parte de un refrigerio.