AGENCIAS
TOKIO.- Tokyo Electric Power Co (Tepco), operador de la central nuclear de Fukushima, dijo ayer que conectó una línea de transmisión externa con la planta nuclear y confirmó que podrá suministrar electricidad para encender bombas de agua necesarias para enfriar las varillas de combustible nuclear usadas, en un intento para evitar una catastrófica fuga de radiación.
El peligroso y complejo desafío para los trabajadores en la central Fukushima, 240 kilómetros al norte de Tokio, ha alterado a los mercados financieros mundiales y provocado una evaluación internacional de la seguridad nuclear.
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Trabajadores también arrojaron agua sobre el reactor número 3, uno de los que está en situación más crítica. Si esas técnicas fallan, la última opción sería enterrar la extensa planta, de 40 años de antigüedad, bajo arena y concreto, el método usado para sellar enormes filtraciones en Chernóbil en 1986.
A pesar de la restauración de los sistemas de energía de la planta, las bombas podrían estar demasiado dañadas como para funcionar.
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"Si logran poner en marcha esas bombas eléctricas y pueden empezar a llevar agua al núcleo, deberían poder controlarlo en los próximos días", indicó Laurence Williams, de la University of Central Lancashire, en Gran Bretaña.
La última opción de enterrar los reactores dejaría partes de Japón inaccesibles durante décadas. El gobierno subió el nivel del incidente a 5 desde 4 en la escala INES, de siete peldaños que evalúa la gravedad de los accidentes nucleares.
Eso coloca la situación a la par del accidente de Three Mile Island en Estados Unidos en 1979, aunque algunos expertos dicen que el panorama actual es más serio. Chernóbil se ubicó en el nivel 7 de la escala.
La agencia de la ONU sobre energía atómica dijo que la situación en Japón no se estaba agravando, pero que continuaba como "muy seria".
La operación para evitar una fuga de radiación masiva ha opacado el aspecto humanitario de la crisis, la peor que vive Japón desde la Segunda Guerra Mundial.
El sismo y tsunami causaron ya 7.197 muertos, más que el registrado en Kobe (oeste) en 1995, que dejó 6.434 víctimas mortales, informó ayer la policía japonesa. El saldo podría aumentar ya que el número de desaparecidos identificados se eleva a 10.905, y hay pocas esperanzas de encontrar a más sobrevivientes.
Unas 390.000 personas enfrentaban temperaturas gélidas en refugios en las áreas costeras del noreste. Hay escasez de alimentos, agua, medicina y combustible para calefacción.
El Gobierno admitió que podría haber tomado medidas más rápidas para lidiar con los múltiples desastres. "Un masivo sismo sin precedentes y un enorme tsunami sacudieron a Japón. Como resultado, ocurrieron sucesos que no habían sido anticipados en términos de la respuesta a un desastre general", reconoció el jefe de gabinete, Yukio Edano.
Millones de personas en Tokio siguen encerradas, temiendo una explosión de material radiactivo en el complejo.
La apremiante situación de las personas que se quedaron sin hogar por el sismo y el tsunami se agravó por una ola de frío que provocó intensas nevadas en las áreas más afectadas.
Casi 290.000 hogares en el norte seguían sin electricidad, en medio de temperaturas cercanas a cero ayer por la tarde. Al menos 940.000 personas estaban sin suministro de agua.
Un diplomático con acceso al rastreo que hace Naciones Unidas a la radiación de Japón dijo ayer que esta llegó al sur de California, pero que sus primeras lecturas son "aproximadamente mil millones de veces menores a los niveles que podrían causar daños a la salud".
Gobiernos de todo el mundo, incluidos latinoamericanos, continúan con sus planes de evacuación de sus ciudadanos y continúan alquilando aviones para el efecto.
Sobreviviente
Un hombre fue retirado con vida hoy desde los escombros, ocho días después del terremoto y tsunami, dijo el Ejército.
El sobreviviente, de unos 20 años, estaba en shock y no podía hablar cuando fue hallado en la ciudad de Kesennuma, en la prefectura de Miyagi, una de las regiones más duramente golpeadas por el terremoto.
El sobreviviente estaba atrapado en el segundo piso de una casa y se había envuelto en una frazada, dijo la agencia Kyodo.
En Perú
Perú vivió ayer una jornada de duelo nacional laborable en solidaridad con las víctimas del terremoto y tsunami que asolaron Japón y anunció ayudas económicas a los peruanos que deseen regresar a su país natal. Las banderas a media asta reflejaron el apoyo simbólico.
En Alemania
La compañía de trenes alemana Deutsche Bahn (DB), el mayor consumidor de electricidad del país, acordó ayer elevar en los próximos años el porcentaje de energía que consume procedente de fuentes renovables y reducir su dependencia de la energía atómica tras la crisis nuclear nipona.