El portal en internet de Diario Olé de
argentina publicó una nota sobre el maleficio que habría encontrado un
empleado del Barcelona Sporting Club en la cancha principal del estadio
Monumental.
“Cosa de Brujas”, fue el titular
con el cual destacan el supuesto maleficio encontrado y que el
presidente de los toreros, Alfonso Harb, tildó de “Brujería”.
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A continuación la nota del medio argentino:
El
presidente del Barcelona de Ecuador aseguró que su equipo no sale
campeón desde hace 13 años por ¡un hechizo maligno! Para remediar ese
conjuro, mostró la imagen de una virgen en plena presentación de
jugadores. El camerunés Makanaki, apuntado como el artífice de ese mal.
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"En
algo hay que creer", dice una vieja frase. Eso es lo que podría decirse
para enmarcar y tratar de darle un contexto a la increíble revelación
de Alfonso Harb, presidente del Barcelona de Guayaquil, quien explicó
que su entidad no sale campeón en el fútbol de Ecuador hace 13 años por
¡una brujería!
Todo surgió hace algunos días, en la presentación
de algunas de las incorporaciones del equipo Canario de cara a este
semestre, entre las que se encuentra el argentino Rodrigo Marangoni,
aquel volante de exquisita pegada que en el último tiempo jugó para
Deportes Tolima de Colombia. Dejando de lado la importancia de los 13
futbolistas traídos para dar pelea en el torneo, el mandatario, en
medio de la conferencia de prensa armada, tomó el micrófono para
comunicar por qué su equipo no sale campeón desde hace tiempo.
“Hemos
descubierto algo diabólico con lo que han intentado hacerle daño a
Barcelona”, señaló Harb al revelar que hace tres meses un jardinero
habían encontrado enterradas dos botellas de vino detrás de los arcos
del estadio con un escudo, una sustancia mal oliente y un muñeco con el
uniforme del club perforados por alfileres.
El mito afirma que
esa maldición habría sido perpetuada por el camerunés Cyril Makanaki,
luego de que no le pagaran su salario en la década pasada. Como
frutilla del postre, en medio de esa presentación puesta en un
principio para mostrar las caras de Paolo Saucedo, Hólger Matamoros,
Armando Wila y Pablo Palacio, el mandatario sacó una imagen de la
Virgen Dolorosa “encomendando” a su ayuda divina para superar esa onda
maligna.
Inmediatamente, las repercusiones no se hicieron
esperar. Burlas, risas e indiferencias se mezclaron con las opiniones
de parapsicólogos y expertos en este tipo de cuestiones. Bajo el dilema
de creer o no, la nota es que hasta el alcalde de la ciudad, Jaime
Nebot, se metió en el tema y dio su parecer: “La Virgen no va a hacer
goles”.
Tratando de bajar los decibeles a esta situación
desatada, el argentino Rubén Insúa, DT del Barsa, destacó: “Respeto las
creencias… esas cosas no afectarán el rendimiento del equipo.
Coincidiendo con el entrenador, el volante Matías Oyola, otro argento
que jugó en River, Belgrano y Colón, dijo que los partidos “se ganan
dentro y fuera de la cancha y, por eso, es cosa de los futbolistas”.
La
polémica está desatada y en Guayaquil, por estas horas, se habla más de
rituales, hechizos y conjuros que de fútbol en estado puro.