AFP
BUENOS AIRES.- La derrota por 2-0 que sufrió Independiente ante el brasileño Goiás en la primera final de la Copa Sudamericana 2010 fue recibida como "un duro golpe" para el equipo argentino, aunque puede aún revertir la serie en la revancha, señaló ayer la prensa argentina.
Goiás, en un duelo disputado ante unos 35.000 espectadores en el estadio Serra Dourada de la ciudad de Goiania, el pasado miércoles, se impuso con tantos de los atacantes Rafael Moura y Otacilio Neto, a los 14 y 20 minutos del partido.
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'Barato y con tarjeta' tituló diario Olé, en alusión a que Independiente podría haber caído por un margen mayor.
Destacó en su portada que el equipo argentino "confía en que acá (Buenos Aires) da vuelta la final (el próximo miércoles 8)", pero advirtió que Goiás "ganó tres de cuatro (partidos) como visitante en la Copa".
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"Independiente se comió dos goles en los primeros 25 minutos y pintaba muy brava (complicada) la noche. El Rojo siente que pasó la tormenta y que salió con vida de Brasil", agregó.
Pese a la derrota, el entrenador del equipo argentino, Antonio Mohamed, se mostró optimista por la vuelta.
"Vamos a ser campeones, no tengo dudas. Nos dejaron con vida. Nos vamos con una derrota que nos duele, pero estamos más vivos que nunca. Lo vamos a dar vuelta, me tengo muchísima fe y confianza", declaró.
Según diario Clarín, "a Independiente no le salió casi nada y ahora se aferra a la revancha en Avellaneda". Para La Nación, "los Rojos sufrieron un golpe a su sueño" en la Sudamericana.