Lourdes Sánchez
Guayaquil.- Muchas personas de diferentes nacionalidades hemos rezado a Dios y a la Virgen para que los 33 hombres enterrados profundamente por un derrumbe de una mina en Chile sean rescatados sanos; para que muchas personas, instituciones, se unan sin distingos de ideología, raza, credo, condición económica, política, para salvar a estos hombres sencillos, planificando a tiempo y con honradez un plan de rescate.

Lo que primó no fue detenerse en cacería de culpables del accidente, eso después; ni gastar tiempo en discursos, ni ganar protagonismo, sino actuar para salvar vidas.

Lourdes Sánchez,
Guayaquil