Ocho delincuentes armados irrumpieron en la agencia del Banco de Guayaquil ubicada en la avenida Remigio Crespo y Juan Íñiguez, en esta ciudad, y tras someter a los guardias de seguridad se llevaron dinero de las cajas y pertenencias de varias personas que se encontraban en el interior.
El hecho se registró a las 08:40 de ayer y según versión de testigos, dos o tres delincuentes, quienes vestían ternos, estaban en el interior esperando a que ingresaran los otros miembros de la banda.
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Una vez dentro los antisociales obligaron a todas las personas a tirarse al piso, mientras sacaban el dinero de las cajas.
Un empleado de la entidad, que no se identificó, dijo que los delincuentes llegaron hasta el segundo piso y lanzaron una bomba lacrimógena que no se activó por completo. “Al parecer querían llegar hasta las bóvedas, pero no pudieron porque la Policía llegó de inmediato”, indicó.
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En pocos minutos los uniformados se ubicaron en los exteriores de la agencia bancaria y se produjo un cruce de balas que dejó herido a un gendarme de apellido Yanza, conductor de una camioneta policial. Las balas impactaron también en otros vehículos particulares estacionados en el sitio.
Diego Astudillo, ex funcionario municipal, narró que circulaba en su vehículo por la avenida Remigio Crespo y al llegar a la agencia bancaria fue sorprendido por varios delincuentes que salían en precipitada carrera disparando contra lo que se atravesaba.
“Lo único que hice fue agacharme, porque sentí el impacto de las balas en mi carro”, manifestó.
Otra testigo del hecho indicó que una persona que vestía un mandil de médico y una mascarilla empujó a su padre y lo obligó a tenderse en el piso.
Asimismo, otra persona que estaba en el interior dijo que los delincuentes arremetieron en pocos minutos y se llevaron el dinero que iba a depositar, tarjetas de crédito y el teléfono celular.
La Policía informó que los ladrones abordaron una camioneta Chevrolet de placa GHI 292, la que posteriormente fue abandonada en las calles Juan Íñiguez y Gonzalo Cordero, a dos cuadras de donde se cometió el atraco.
La Policía indicó que, al dejar abandonada la camioneta, subieron en otros automotores y huyeron con dirección a la vía Panamericana Norte.
Investigaciones
Personal de la Fiscalía del Azuay llegó hasta el banco y recogió los testimonios de las personas que se encontraban en el interior y de los empleados, mientras que el departamento de Criminalística recogía las evidencias como balas percutadas y otras.
Entre las personas que vivieron esta experiencia hubo pedidos para que las autoridades “hagan algo” por frenar la inseguridad que se vive en la otrora tranquila ciudad de Cuenca.
Mauricio Orellana, morador de la zona, dijo que es insoportable esta situación y pidió al presidente Rafael Correa que declare a Cuenca en estado de excepción.
Roxana Sánchez, otra moradora, manifestó que la inseguridad que reina en la ciudad es algo incontrolable. “Tenemos miedo de salir a la calle porque no sabemos a qué hora nos puede pasar algo”, agregó.
Los comentarios de la gente fueron coincidentes y todos exigían seguridad y control a las autoridades. Hasta el cierre de esta edición no había una versión de los funcionarios del banco para conocer el monto del robo, aunque preliminarmente se dijo que sería de unos cuatro mil dólares.
Detención
Se conoció que durante el operativo, en el sector de la ciudadela Kennedy, fueron detenidas dos personas armadas a bordo de una camioneta, pero según investigaciones preliminares, estas custodiaban un camión de una empresa y nada tenían que ver con el atraco al banco.
Otro caso
El pasado 3 de julio, una banda de antisociales que intentó asaltar una agencia del Banco del Austro se enfrentó a la Policía Nacional. En esa ocasión, tres personas murieron: dos presuntos delincuentes y Carlos Salamea, quien fue retenido con su vehículo por los pillos en la huida.