AFP
NUEVA ORLEANS, EE.UU..- El gigante petrolero British Petroleum (BP) emprende una campaña publicitaria masiva en los mayores periódicos de Estados Unidos, en un esfuerzo por recuperar la credibilidad perdida tras el gigantesco derrame que asuela las costas de Luisiana.
Una página entera titulada "Respuesta a la fuga de petróleo en el Golfo de México. Lo que estamos haciendo. Cómo conseguir más información", apareció el domingo en los diarios The New York Times y Wall Street Journal.
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British Petroleum trata de convencer a los lectores que está haciendo todo lo posible para parar la marea negra que, al alcanzar las costas de Luisiana, generó terribles escenas de pantanos y aves marinas cubiertos de petróleo, algo que constituye una pésima publicidad para la petrolera.
Mientras, cientos de trabajadores y voluntarios que integran los equipos de rescate de animales que recorren las costas de Luisiana se preparan para un aumento de pájaros y otras especies afectadas por la espesa mancha de crudo.
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No hay que pensar que porque aún no hay miles de animales contaminados o muertos por el petróleo, el derrame no va a impactar, dijo Ralph Morgenweck, consejero científico de los servicios de pesca y conservación de flora y fauna de Estados Unidos.
Un total de 39 pájaros contaminados han sido recuperados vivos y 85 animales visiblemente cubiertos de aceite fueron hallados muertos, anunciaron fuentes oficiales el domingo.
Diecinueve delfines y 193 tortugas marinas fueron halladas muertos en las zonas costeras
El derrame que afecta al Golfo de México lleva camino de convertirse en un desastre medio ambiental peor que el del Exxon Valdez, en 1989, considerado hasta ahora el más grave sucedido en Estados Unidos.
En Fort Jackson, uno de los cuatro centros de rehabilitación de animales creados después de la catástrofe, los expertos informan sobre un aumento de la aparición de pájaros cubiertos de petróleo empetrolados por el vertido de BP.
La principal preocupación de los expertos en esta etapa es que los voluntarios sin experiencia traten de limpiar a los pájaros nada más sacarlos de la mancha de petróleo y acaben dañándolos.
"No queremos gente que los limpie en el barco de rescate, porque los pájaros podrían morir de hipotermia incluso en un día cálido", dice Barbara Callahn, del Centro Internacional de Rescate de Pájaros. Las aves pueden morir también a causa de la ingestión del petróleo o ahogarse por el peso.
"Es como si trataras de nadar llevando un abrigo largo. Probablemente no aguantarías mucho", dice Callahn.
Desde el 20 de abril, día en que explotó la plataforma Deepwater Horizon, que se hundió dos días más tarde, estimaciones oficiales señalan que 800.000 litros diarios de petróleo son vertidos en el mar, aunque expertos independientes estiman que el tamaño real del derrame es al menos diez veces mayor.