AP
AMSTERDAM, Holanda.- El primer ministro de Holanda, Jan Peter Balkenende, dijo este domingo que los soldados de su país comenzarán a abandonar el sur de Afganistán en agosto, ya que el gobierno holandés en funciones no tiene autoridad para aceptar una petición de la OTAN a fin de que sigan en esas posiciones.
Conforme al sistema holandés, un gabinete en funciones no puede adoptar medidas por falta de consenso y por lo tanto Balkenende dijo estar obligado por una decisión anterior a ceder el mando en Uruzgán a partir del primero de agosto.
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Al día siguiente de fracasar su gobierno de coalición debido al tema, Balkenende dijo que Holanda concluirá su presencia en la provincia de Uruzgán, donde han muerto 21 soldados holandeses desde 2006.
Nuestra tarea como nación puntera concluye en agosto de este año, dijo el primer ministro a la televisión holandesa.
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Una maratónica reunión del gabinete concluida antes del sábado al amanecer terminó con el abandono del segundo partido más importante en el gobierno, el Laborista, que acusó a la Alianza Cristiano Demócrata de renegar de un acuerdo logrado en 2007 para retirar la tropa este año.
El lunes, el primer ministro comunicará oficialmente a la reina Beatriz que no cuenta ya con mayoría en el parlamento y presentará la dimisión de sus seis ministros del Partido Laborista. Ello seguramente contribuirá a unas elecciones generales en mayo, un año antes de lo establecido por la ley.
El repliegue militar fue una amarga píldora para Balkenende, que defendió la presencia de la tropa holandesa en Uruzgán para entrenar a las fuerzas de seguridad afganas. Repitió el domingo que no tendría valor alguno realizar esos entrenamientos fuera de Uruzgan.
La retirada holandesa se consumará en tres meses y los últimos de sus soldados abandonarán la provincia para diciembre.