El empresario cuencano Germánico Benigno Bravo, de 61 años, fue hallado maniatado y sin vida ayer en su vivienda, que está ubicada en la avenida Gil Ramírez Dávalos y Las Alcabalas, por el sector de la terminal terrestre de la ciudad.
El hallazgo lo hizo Julia Fajardo, empleada de la víctima.
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Según la mujer, llegó a laborar a la casa del occiso a las 07:00 y tuvo que ingresar por un restaurante en la planta baja porque las puertas externas estaban cerradas.
Dentro del inmueble se percató de que todo estaba revuelto en el interior.
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Cuando entró al dormitorio principal halló junto a la cama a su patrón, Germánico Benigno Bravo. El hombre estaba maniatado, con un trapo en la boca y cubierto con una cobija.
La Policía dijo que al parecer varios delincuentes ingresaron en la madrugada y sometieron a la víctima que vivía sola. Su deceso se produjo por asfixia.
Los asaltantes se llevaron de la vivienda objetos de valor y un vehículo Toyota Corolla de placa OCG-674 que estaba guardado en el garaje.
Bravo y sus tres hijos administraban la distribuidora Benigno Bravo & hijos. Además tenía una fábrica de bloques y ladrillos y un almacén ferretero en el centro de Cuenca.
Adriana López, familiar del occiso, reclamó a las autoridades por la inseguridad que se vive en la ciudad y aseguró que el sector donde residía su pariente se ha convertido en una zona de alto riesgo.
“Existen constantes asaltos a la gente. Hay prostitutas, drogadictos, delincuentes que deambulan por aquí y nadie hace nada”, indicó.
Un morador del sector manifestó indignado que la delincuencia se ha tomado la zona y que “buscaremos hacer justicia con nuestras propias manos”.