El Gobierno oficializó la nueva estructura con la que intentará impulsar la iniciativa ITT para evitar la explotación de las reservas petroleras localizadas en el parque Yasuní a cambio de aportes económicos de otras naciones y organizaciones.
Esta constará de tres comisiones: técnica, política y negociadora.
Publicidad
La primera la conformará en su mayoría el equipo técnico que ya trabajó en el proyecto, que se encargará de afinar la propuesta en el día a día.
Esta comisión laborará coordinadamente con el equipo político, que estará liderado por el presidente Rafael Correa y conformado por el vicepresidente Lenin Moreno, los ministros de Relaciones Exteriores, de Recursos no Renovables, de Ambiente, el secretario de la Senplades, el Ecorae y un delegado de la Asamblea Nacional.
Publicidad
Además, se articulará un equipo negociador que lo encabezará el actual secretario de la Comunidad Andina, Freddy Ehlers; el embajador de Ecuador ante las Naciones Unidas, Francisco Carrión, y personas especialistas en temas de negociación en cada región.
Uno de los aspectos que profundizará la nueva Comisión es la búsqueda de respaldo de las naciones árabes y el inicio de una campaña de difusión del proyecto a nivel nacional para conseguir contribuyentes.
“Queremos abrir nuevos espacios e interesados. Nos interesa muchísimo el posicionamiento de la iniciativa en los países árabes. Ahí puede haber una potencialidad para el proyecto”, dijo María Fernanda Espinosa, coordinadora de la Iniciativa Yasuní-ITT.
Por ello, el ministro de Recursos Naturales no Renovables, Germánico Pinto, aseguró que en la reunión de la OPEP realizará los primeros contactos con el Medio Oriente.
Espinosa anunció la continuidad de las conversaciones con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), para el establecimiento del mecanismo financiero (fideicomiso), pero con algunas modificaciones.
Reconoció que uno de los puntos centrales de las conversaciones sobre el fideicomiso son los mecanismos de toma de decisiones.
Para eso el Ecuador propondrá que el país tenga mayoría con tres representantes del Gobierno (elegidos por el Primer Mandatario), dos delegados de los aportantes y un representante de la sociedad civil, con derecho a voz y voto. El PNUD sería el agente administrador del fideicomiso y operaría como Secretaría Técnica.
“Obviamente mucho de los pasos ya avanzados dentro de la estructura de este mecanismos que empezó a negociarse hace algunos meses se mantendrán. Los cuestionamientos que ha hecho el Presidente son muy puntuales y específicos y deberán ser procesados en las últimas semanas”, aseveró.
Espinosa recalcó que nunca se dejó de conversar con el PNUD, pues el embajador Carrión mantuvo varias reuniones, al igual que los representantes diplomáticos del país con miembros de las posibles naciones aportantes.
Asimismo, el destino de los fondos recaudados será de acuerdo al Plan de “Buen Vivir”. El secretario de la Senplades, René Ramírez, señaló que uno de los objetivos es el cambio de matriz energética y la inversión en ciencia y tecnología.
Sobre los plazos, la nueva coordinadora aseguró que no existen tiempos estipulados para las negociaciones y la consecución de recursos.