El 12 de abril del año pasado la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades) publicó en el diario El Comercio algunas reformas necesarias a la Ley de Seguridad Social que supuestamente beneficiarían a miles de afiliados en nuestro Ecuador.
Entre esos puntos estaban la cancelación histórica del Estado al Seguro Social, la ampliación al acceso a las prestaciones y una pensión básica universal; pero lastimosamente nada de esto ha sucedido.
Yo tengo un hermano de 69 años que sufrió un derrame cerebral hace casi 35 años, con una incapacidad física y mental del 60% certificada por el Consejo Nacional de Discapacidades (Conadis) de Guayaquil.
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Mi hermano tiene 159 imposiciones, sin embargo, le dicen que debe cumplir 70 años de edad; es decir, tenemos que orar por el tiempo que le falta para que no se muera y pueda “disfrutar” de su pensión vitalicia.
Señor vicepresidente de la República, Lenin Moreno, ojalá llegue a su conocimiento esta carta, ya que usted lo vivió y padece de esa triste realidad, conoce el dolor y el sufrimiento; por lo tanto, apelo a sus cualidades humanistas que Dios le ha dado y por eso se ha convertido en el “apóstol” de sus discapacitados. Espero que interceda ante esta triste situación.
Luis Mario Contreras Morales,
Quito
